Capítulo #4🔥

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☘La noche transcurrió rápido, sin pensarlo un nuevo día estaba comenzando. Toda la mañana y gran parte de la tarde se fue en papeleos y llamadas, por suerte todo eso ya había terminado y estaba completamente listo, ahora la recién mamá se estaba preparando para volver a casa mientras su esposo le ayudaba con lo que podía. La pequeña maleta ya estaba de nuevo empacada y era llevada por el pelinegro que a su vez ayudaba a su esposa a caminar con cuidado mientras esta llevaba en brazos a su reciente llegada princesa.

Afuera del hospital se encontraba el nuevamente abuelo, Ox Satán. Estaba esperándolos con una de las naves, listo para llevar a su querida hija y a su yerno a casa. ☘

-¡Papá! -gritó al verlo parado delante de la nave-

-No creías que te dejaría sola o ¿sí? -dijo mientras se acercaba y abrazaba a su hija y nieta-

-Pensé que te veríamos en algunos días -contestó dejándose abrazar por su padre-

-Pero que dices Milk. Siempre estoy presente en estos días tan especiales, siempre vengo por ti y mi nuevo nieto, lo hice con Gohan y Goten, claro que con mi nueva nieta no sería la excepción

-Gracias papá

-De nada hija, lo hago con gusto -afirmó- ahora es hora de irnos -dijo separándose de ella- Goku recuerda ayudar a Milk a subir y a abrocharse el cinturón

-Claro Ox -contestó- vamos Milk

-Si -con ayuda de su esposo llegó a su asiento- ya estoy

-¿Segura? ¿estás bien? ¿no te duele nada?

-Si Goku, estoy bien

-Si tú lo dices -sin más se sentó a lado de su esposa, cerró la puerta y Ox despegó-

☘La nave despegó tomando curso hacia las montañas Paoz. Durante el trayecto, la pareja se ponía al corriente con lo sucedido en las últimas semanas, hablaban de todo lo que hicieron, el cómo la pasaron y sobre todo lo mucho que se extrañaron. No pasó mucho tiempo para que la nave comenzara a aterrizar frente a la casa de los Son, todo se veía normal, pero dentro de esta ya se encontraba el resto de la familia esperando. ☘

-Con cuidado Milk -dijo ayudando a su esposa a bajar- no te vayas a lastimar

-Gracias Goku, pero estoy bien, no te preocupes tanto

-Milk, déjate ayudar hija -intervino Ox- acabas de dar a luz

-Si Milk -dijo el pelinegro apoyando a su suegro-

-Bien, pero solo no me hagan sentir inútil -aceptó en un suspiro, caminando hacia la casa con la pequeña en brazos-

-Claro -dijeron al mismo tiempo-

-La hubieras visto cuando nació Goten -habló en voz baja aquel grande rey-

-¿Con Goten? -preguntó sin entender muy bien-

-Si, creo que en esa época era más testadura que de costumbre -dijo con una pequeña risa- ya la conoces, quería hacer todo por si sola, la única ayuda que aceptaba era la de Gohan y muy de vez en cuando la mía

-Ya veo -contestó con algo de nostalgia. Él no sabía nada de lo que hubiera pasado en esas fechas, no más de lo que su esposa le ha contado- tal vez mi ayuda si la hubiera aceptado

-Si, bueno... es probable, pero al menos al estar en el otro mundo te salvaste de ser regañado por Milk o que te obligara a trabajar, después de todo nunca te ha gustado eso, o no muchacho -contestó- además...

-¿Qué tanto hablan? -preguntó interrumpiendo- no puedo abrir con la bebé en brazos

-Te ayudo hija -dijo mientras se acercaba rápidamente hasta ella- listo, después de ti -mencionó abriendo la puerta-

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