Daré Todo Por Ti | LeeGaa | 愛

❀;; Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 4

Naruto frunció el ceño al escuchar a Sai, por alguna razón su actitud nunca fue muy agradable para él; además, ahora podría estar en cierta desventaja con el azabache, así que no se mostrará débil ante Sai.

— ¿Acaso te gusta escuchar conversaciones ajenas? — El Uzumaki vio directamente a los ojos al de tez pálida; Sai solamente se encogió de hombros sin ser afectado emocionalmente por el tono molesto en la voz del rubio.

El ambiente se estaba poniendo tenso, sobre todo para Naruto y Lee, este último ni siquiera sabía que acciones tomar ante la situación.

No quiere generar un conflicto, pero tampoco quiere que Sai le cuente a alguien más el "secreto" de Naruto.

— No es mi culpa — Se defendió el dibujante rápidamente. — Llevo sentado un buen rato en ese árbol, quizás desde la mañana.

— ¿Por qué? — Lee lo vio de forma curiosa. ¿Sentado en un árbol desde la mañana? ¿Quién haría algo como eso?

— ¿Por qué debería contarte lo que hago o no hago sobre un árbol?

— Este tipo es tan insoportable, de veras — Comentó Naruto apretando sus puños.

— ¿Me importa?

— ¡Imbécil! — La paciencia del Uzumaki se estaba agotando; ganas no le faltaban para ir a darle un puñetazo en su rostro arrogante. Pero Lee pudo predecir sus deseos y rápidamente lo tomó de los hombros. — Lee, hay que pegarle, quiero pegarle.

— Tranquilo Naruto — Habló con un tono serio, su amigo al darse cuenta de eso se mantuvo en silencio.

Su sangre le hervía, nunca se llevó bien con Sai, eso hacía que pelearan verbalmente de vez en cuando. Y el azabache, en cierto punto, disfrutaba ver enfurecido al Uzumaki; observar como cae fácilmente toda su paciencia y amabilidad es tan divertido como dibujar.

— Sai ¿Le dirás a alguien lo que escuchaste? — Preguntó Rock, el mencionado se mantuvo en silencio causando nervios en cada célula de su cuerpo.

El ambiente se envolvió en completo suspenso; Naruto sentía una sensación extraña en su estómago, seguramente el miedo de que Sai tenga planes malignos para darle una reputación horrible ante todos.

El aire sopló fuerte en el lugar, jugando como un completo travieso con el cabello de los tres chicos.

Levantó unas cuantas hojas del suelo para que puedan dar un paseo, el silencio se volvió el rey del parque; los únicos sonidos que permitía pasar por su palacio era el silbido del viento, junto con el sonido de la danza de las ramas del árbol.

En ningún segundo, Naruto y Lee despegaron su vista de Sai; el de tez blanca cerró sus ojos con completa calma.

— No tengo motivos para decirlo.

Lee soltó un suspiro de alivio al escuchar esas palabras.

Naruto aún seguía aturdido por lo que acaba de pasar, aún así, sintió que un peso en sus hombros desapareció.

— Pero...

¿"Pero"? ¿Dijo "PERO"?

— Tampoco tengo motivos para guardar el secreto — Sonrió de forma confiada abriendo sus ojos; lo primero con lo que se topó fue con la mirada de odio por parte de Naruto. — Adiós — Dicho eso, se dio media vuelta para ir a su casa, ignorando los gritos del Uzumaki dirigidos, solamente para él.

— ¡¿Qué?! ¡¿Qué clase de respuesta es esa?!

— Ya Naruto...

— ¡Lee! ¡Deja que le de su merecido a ese estúpido arrogante!