-No te rías, no te rías...- era lo único que se repetía Yugi mentalmente una y otra vez, y pensaba que si seguía mordiéndose el labio así se desangraría. -No te rías, Yugi, recuerda: si llegas a reírte Dartz te va a castigar, así que trata de no reír... ¡Pero es que es casi imposible!
La razón de tratar de contener su inaguantable risa, eran sus dos desastrosas hermanastras.
Al principio, comenzaron con la ceremonia del té, y solo puede decir... que nunca vio algo peor en su vida. Anzu fue la primera de las dos, había tomado la bandeja del té en sus manos con las tazas, los platos y la tetera sobre ella, Dartz le dijo que intentara servirle el té a su hermana, y al intentarlo se tropezó con el borde de su vestido cayendo de cara al suelo y derramándolo todo, mientras Vivian se reía, Anzu se quejaba sobre que ese era el trabajo de los sirvientes, Dartz masajeándose las sienes tratando de mantener la calma y Yugi quedándose parado al lado de él callado y educado, tratando de contener la risa.
Luego fue el turno de Vivian, y creo que fue aun peor que el de su hermana. Repitió el mismo patrón de tomar la bandeja con cuidado entre sus manos y mientras iba caminando se notaba que lo hacía mucho mejor de lo que Anzu lo había hecho, y claramente esto provocó los celos de la otra hermana. Así que mientras Vivian iba caminando pavoneándose y con la nariz en alto directo a servirle el té a su hermana, Anzu aprovechó este momento de distracción de ella para meterle el pie y hacer la tropezar, pero el tiro le salió por la culata cuando de hecho Vivian sí tropezó, pero al hacerlo dejó caer todas las coas de la bandeja sobre Anzu, haciendo que se ensuciara todo el vestido con las cremas, azucares y toda la tetera vertida sobre su cabeza.
Esto obviamente provocó que comenzara otra salvaje discusión entre ellas; Vivian acusándola de haberle hecho tropezar y Anzu diciendo que había derramado todo el contenido sobre ella apropósito. En ese momento Yugi tuvo que ir corriendo a la cocina cuando su padrastro le ordenó traerle su frasco que aspirinas, viendo cómo la discusión de las hermanas continuaba mientras Yugi limpiaba todo el desastre calladamente, con una pequeña sonrisa discreta en su rostro.
Luego de haber limpiado todo el desorden anterior y que ambas hermanas cambiaran sus vestidos sucios, llegó el momento de la siguiente lección: la danza.
Pero digamos que tuvo los mismos resultados exitosos que tuvo la ceremonia del té.
Ambas estaban bailando comola pareja de la otra mientras eran dirigidas por Dartz como su maestro y siguiendo el ritmo de la música. Pero no habían pasado ni dos minutos cuando comenzaron a pisarse entre ellas tropezando con sus vestidos, y al final Vivian pisó el encajé del suyo rompiéndolo y cayendo hacia atrás, arrastrando a Anzu con ella en su caía.
Yugi en ese momento estaba luchando entre la risa y el miedo; risa por ver el ridículo que estaban causando sus caprichosas hermanastras y miedo al ver que su padrastro perdía más la paciencia a cada minuto, y Yugi sabía que cuando eso pasaba, siempre terminaba desquitándose con él. Así que lo más sensato que se le ocurrió hacer fue moverse un par de pasos a un lado discretamente, alejándose del inminente pronto estallido del dragón.
La siguiente lección que estaban practicando era la pintura.
Al principio se suponía que pintarían un arreglo de frutas que estaba sobre una mesa, y luego de que Yugi les trajera todos sus materiales, comenzaron a pintar en los lienzos. Todo iba con tranquilidad y silencio, para la calma de la paciencia de Dartz y un gran alivio a los nervios de Yugi. Pero cuando las dos revelaron sus pinturas se notaron lo horriblemente evidente que era que ambas hermanas no tenían talento ni para la pintura. Dartz les mostró una sonrisa forzada y estaba punto de indicarles algunas correcciones, pero antes de que pudiera Vivian comenzó a burlarse del dibujo de su hermana, haciendo que la otra de molestara y se burlara de igual manera de la otra pintura, y terminando inevitablemente en otra desastrosa pelea que esta vez involucró que se lanzaran pintura entre ellas.
ESTÁS LEYENDO
Violeta Cenicienta
FantasyTras la muerte de su madre cuando era un niño, Yugi Mutou fue obligado a convertirse en un sirviente en su propia casa, siendo mandado bajo las ordenes de su cruel padrastro y hermanastras, sintiendo que el resto de su vida quedaría siempre en pen...