Nuestros mejores problemas

Cap: 36

[Capitulo 6673 de palabras :3]

Han pasado varias horas desde el cumpleaños de ajay y naoli, justo en este momento. El cielo comenzaba a iluminarse nuevamente, dando el gran inicio de un nuevo día para todos representado en rayos de luz.

Ahora mismo, se podía observar una habitación silenciosa. En dónde únicamente había dos jóvenes durmiendo tranquilamente, más exactos. Una peli-frambuesa y un peli-negro, quien este último se encontraba despertando lentamente. Soltando un largo bostezo mientras trataba de acomodarse para levantarse de dicha cama.

"Bien... Supongo que lo mejor sería bañarme ahora y- ¿Eh?" (Ren)

Sin poder terminar su oración, el espadachín se quedó en completó silencio. Al notar como unas manos se encontraban por la zona de su pecho, algo que lo avergonzó levemente. Por lo que decidió retirarlas con sumo cuidado, sin contar muy bien el movimiento que había hecho. Pues al momento de intentar aquello, ren accidentalmente había retrocedido de más.

Provocando que esté pudiera sentir perfectamente, como dos cosas suaves se encontraban apegadas en su espalda. Junto a un suave y cálido aire en su nuca, aquello claramente provocado por nadie más que la misma eclair. Quien se encontraba abrazando por detrás al chico, cual no pudo evitar tener un fuerte sonrojo en su rostro.

"A-ay, carajo..." (Ren)

Sintiendo como sus nervios estaban por las nubes, el espadachín con algo de torpeza logro separarse finalmente de la guerrera. Levantándose de la cama en un segundo, parándose a unos pocos metros de esta. Notando como su corazón latía como loco, cuál se fue calmando lentamente con el paso de los segundos.

Al observar mucho más detalladamente, la escena que se encontraba justo delante de sus ojos. Pues únicamente podía ver una suave y cómoda cama, en la que se encontraba nadie más que la peli-frambuesa. Quien se encontraba con una gran parte de su rostro siendo cubierto por su cabello, algo en lo que ren decidió interactuar.

Moviendo cada uno con suma delicadeza, dejando observar perfectamente el hermoso y saludable rostro de la chica. Cualidades que resaltaban mucho más, con aquella expresión tranquila y serena que poseía actualmente. Totalmente diferentes a su clásica mirada llena de determinación y justicia. Haciendo que ren únicamente sonriera, mientras se perdiera cada vez más en aquella gran belleza guerrera que tenía delante suya.

"*Carajo... Supongo que a naofumi también le costo acostumbrarse a eso*" (Ren)

"Hmp..." (Eclair)

Soltando un pequeño ruido, la peli-frambuesa únicamente hizo un leve movimiento. Cuál hizo reaccionar nuevamente al espadachín, quien al ver que está probablemente se podría despertar. Inmediatamente se levantó otra vez de la cama, tomando algunas de sus prendas y retirándose hacia el baño.

(Algunos minutos después)

Tras haberse dado una fría ducha, la puerta del baño comenzó a abrirse. Dejando ver nuevamente al peli-negro, quien se encontraba ya completamente vestido. Llevando una camiseta morada junto a un pantalón de color negro, secando su cabello con una toalla.

Notando el olor a comida mientras hacia eso, por lo que decidió acercarse a la cocina. Notando como la peli-frambuesa se encontraba en dicho lugar, preparando lo que sería el desayuno del día de hoy. Por lo que decidió acercarse a ella y saludarla amigablemente.

"Buenos días" (Ren)

Escuchando la voz de ren detrás suya, eclair no pudo evitar saltar levemente de sorpresa. Quedándose en silencio por algunos segundos, antes de responder al saludo de este mismo. Sin apartar su mirada en ningún momento, de aquella comida que se encontraba preparando.