Cartas que nadie leerá [Cartas #1]

IV

Capitulo narrado por Damián, este es un flashback de hace tres años antes de que él conociera a Violeta en persona.

Flashback

Iba saliendo del colegio cuando me encontré con quién se hacía llamar mi primo.

—¡Hey! Dami, hace tiempo que no te veía— se acercó a mi el chico de cabello semi rizado.

—¡Joel, que gran sorpresa!— Le di una palmada al acercarme a él.

—Lo se, ¿Qué tal este colegio de quinta?— señaló el edificio en la cuál era mi actual secundaria— ¿Ya encontraste a alguien el cuál engañar para este año?— pregunto mientras se alejaba de mí.

—Claro que no, todos son muy poca cosa aquí.—trate de alcanzarle el pasó.

—Vaya, tu no cambias Dami—sonrio de lado.

Subimos a mi auto y conduje hacia la pequeña casa oculta entre las colinas. Al llegar encontramos a mi hermana, Elizabeth una amiga de mi primo y también a una chica llamada Daniela.

—Bueno, probablemente se preguntarán qué hacen aquí— dijo el chico.

—Habla ya Joel o me largó— dijo la chica de baja estatura y cabello rizado.

—Claro Dani, bueno su visita es que tenemos un plan para hacerle la vida imposible a alguien— lanzo unas carpetas al escritorio que teníamos rodeando.

—¿Quién es ella?— pregunté.

—Ella, es mi ex prometida— soltó directo—; esa chica ha provocado una decadencia en todos nosotros de manera involuntaria.

—¿De que tipo de decadencia?—pregunte— solo se ve como una chica normal y corriente— añadí.

Todos los presentes voltearon a verme detenidamente. — Damián, ella no es cualquier chica— dijo la tal Elizabeth.

—¿No?— alcé mi ceja.

La chica negó— No, ella es mucho más que una simple "chica cualquiera" Damián, nuestro objetivo es asesinarla en esta ocasión o más bien que se suicidé— Agregó Joel.

Mire a mi hermana y ella me regreso su mirada confundida, al parecer tampoco sabía que es lo que exactamente sucedía.

— A ver primitos, como les explicó que también ustedes están involucrados en este asunto— Joel frotó su mano en su ceja.

—¿Quieres asesinarla solo por qué canceló su boda?— hablo por fin mi hermana.

—Evelyn, por fin hablas.— sonó sarcástico.