Ella es del Alpha [Hermanos Miller] TERMINADA

Capitulo 22_ New Versión

* * * ** * * * * **  *Capitulo 22 * * * ** * * ** * * * 

Fulminé a Zack con la mirada, pero este la esquivo y se centró en conducir.

Me acomode en el asiento de atrás y me tire encima de las piernas de Eduard. Él puso sus manos detrás y apego su cabeza a la ventana. El camino duro mucho que cuando empecé a despertar, la luz en mis ojos hizo que me salieran algunas lágrimas.

—Ya nos acercamos—Informó Zack

Me levanté e hice pequeños estiramientos, ya que tenía el cuello adormecido. Dentro del carro no fue fácil, pero al menos relaje mis músculos. Después de unos minutos llegamos a una de las subcapitales del Capitolio. El carro se desvió hacia una enorme casa de azar.

¿Acaso era un chiste? Al menos yo no podía divertirme en una situación así.

—Creo que debería quedarme en el auto, la luz solar en esta región es un poco fuerte— Dijo Eduard

Era cierto, en la republica el invierno ocultaba el sol la mayoría de la mañana, así que con normalidad lo veía transcurrir.

Zack dejo que Eduard se quedara en el estacionamiento cerrado y los demás descendimos del auto.

Seguía molesta me mantuve atrás de todos ellos mientras entrabamos al local. Zack hablo con el de seguridad y estuvimos unos segundos esperando hasta que nos dejaron pasar.

—¿Y la humana? —

—Viene con nosotros— Siseó Jack y pude ingresara a la habitación privada de las personas.

Aquella habitación resultó ser más un pasadizo con varias puertas, el guardia siguió acompañándonos por el recorrido hasta que llegamos. Abrió la puerta y al instante pudimos observar a un hombre de espaldas.

—Primo Josh — Tania se aventó a saludarlo.

—Tanto tiempo sin verlos, espero que hayan venido a divertirse; porque de favores no hago ninguno— Farfulló el joven

No tenía idea de quien era, pero arrugue las cejas de inmediato.

—¿Un regalo para mí? —Dijo indicándome con la mirada y solo trate de ocultarme detrás de los presentes — Zack se habla mucho de ti en las reuniones. ¿Acaso ella es la Mate de quien tanto hablan?

—Sí, ella es mi compañera— Afirmó Zack

—Lastima, tenía tantos años por delante para disfrutar como soltero —Comentó aquella persona— Sabías que la están buscando. ¿Verdad?

—Necesito mantenerla aquí por un par de días, tengo un plan — Inquirió Zack

El otro hombre hizo una señal para que nos retiráramos.

—Llévalos a las diferentes salas, que se diviertan son invitados — Ordenó aquel hombre al guardia

Jack se posiciono detrás de mí.

—Este lugar es algo peligroso, el hombre de la habitación es el Gran Alpha; no tiene compañera sí que busca otros tipos de diversión, se cree que se quedara solo — Bromeó Jack

Solo asomé una sonrisa mientras nos redireccionaban. Estuvimos participando algunos juegos sencillos, con una acumulación de puntos. Pero quería que de una vez esto se acaba, no entendía el motivo del porque nos escondíamos y cuánto tiempo más íbamos estar así.

—¿Jack que es la "Mita"? — Pregunte mientras tomaba un sorbo de la gaseosa que me habían servido

—No conozco ese término, donde lo escuchaste — Admitió Jack

—El doctor Marcos lo menciono cuando me inyecto algunos calmantes—Informé

—Al final tus sospechas eran ciertas, eres mejor detective que yo. Sobre el término intentare preguntárselo a Zack quizás conozca. —

En ese preciso instante Zack cruzó las puertas y se sentó en uno de los banquillos frente al bar. Jack se disculpó antes de retirarse para los servicios.

Caminé en dirección al bar también, el licor no se me daba bien, pero pediría algo suave. Al llegar vi como Zack se encontraba conversando con varias personas. Tania estaba a su lado igual que muchas chicas que él parecía conocer. Me incomode un poco y trate de no enfocarme en eso.

—Me da dos bebidas fuertes— Dije sin titubeos

Cogí ambos vasos y empecé a caminar rumbo a la puerta. Llevaría uno para Eduard. No era muy buena entablando conversación con varias personas; seguramente perdería mi tiempo tratando de encajar entre ellos

—Eduard, me abres— Mencione un poco fuerte para que me escuchara. Él abrió la puerta. —¿Estabas descansando?

—No, solo estaba pensando un poco—

—Traje una bebida para tí— Dije extendiendo una de mis manos, el cogió ambas bebidas para que así yo pudiera ingresar al auto.

Al encender la luz artificial del auto me dí cuenta de las quemaduras que tenía Eduard por el rostro y las manos.

—¿Esto sucedió durante el viaje? —Pregunte sorprendida pasando mi mano cerca de la zona y él se retorció un poco de dolor— Si me hubieras dicho te hubiera prestado mi camiseta

—Estoy bien, es superficial sanara en algunos días—

—¿Días? —

—Sí, ya que no he bebido sangre tardara un tiempo — Informó, me sentí un poco mal.

Me tome el líquido de la copa y rápidamente me llegó al cerebro.

—¿Qué diablos bebiste Claudia? —Inquirió molesto Eduard

—Le pedí algo fuerte, estaba muy molesta y se me olvido al momento de ingerir el líquido — Respondí titubeando entre las palabras

—Bien, yo no lo beberé, al parecer contiene demasiado alcohol—Dijo Eduard al verme

—Eduard, Zack no está... así que puedes beber mi sangre, la necesitas—

Dije despejando mi cabello y ropa de esa zona.

—Claudia detente, no he bebido sangre y yo la última vez introduje mi sangre en ti lo que me hace querer con necesitad morderte—

—Adelante, hazlo— Resople

La boca de Eduard se acercó a mi cuello, sus labios chocaron mi piel antes de sentir las agujas afiladas incrustarse dentro de mi piel. Mi sangre empezó a ser drenada de mi cuerpo, pero se despegó rápidamente.

Volteé para verlo, y era cierto sus heridas y quemaduras empezaron a sanarse muy rápido; y sonreí al verlo.

—Creó que yo también me marearé por culpa de tu sangre, eres como un licor; la próxima vez sacaré mi sangre de tu cuerpo, es algo que demora tiempo por eso no lo hice. —

—¿Eduard, tú sabes que es la "Mita"? —

—Lamentablemente no lo sé, jamás he escuchado de eso— Admitió — Déjame curar lo que hice, si derramo unas gotas de mi sangre, las heridas de tu cuello se irán

Eduard se mordió el labio para que salieran pequeñas gotas de sangre y se acercó hasta mí. Sus labios volvieron a chocar mi piel y el líquido se desplazó.

—Te lo advertí— La voz de Zack llegó a mis oídos al momento que las puertas eran abiertas.