CAPITULO 3: GERALD STUART

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Gracias por esperar.
Ya saben que perdonar no? 

Narra Katarina

Era un día soleado, muy tranquilo y pacífico, perfecto para tomar el te a fuer, y eso era lo principal que pensaba hacer mientras caminaba con paso decidido hacia adentro del gran castillo, mientras recordaba como no podía seguir hablando con Keith sobre la opción de tener hijos, ya que el muy preocupado de mi hermano estaba aumentando sus horas de trabajo, dando la escusa de suceder lo más rápido a mi padre

-me pregunto porque quiere tener el puesto de Duque tan rápido...eso pasaría si ya tuviera esposa- pienso para mi misma mientras suelto un suspiro de cansancio al recordar como la estuvo evitando con el trabajo esos días,  solo dándole una tierna sonrisa y un gran abrazo antes de irse al trabajo -tambien se volvió más cariñoso por alguna razon- pienso para mis adentro mientras miraba el gran y bello patio de castillo.

-por favor señorita Keratina, siéntese en la silla mientras el príncipe Gerald llega- dice la criada que me había escoltado antes de veros irse rápidamente.

Al poco tiempo puede ver llegar al príncipe Gerald igual de rápidamente que la criada, mientras detrás de él los seguían tres mayordomos, uno llevaba una bandeja con una tazas y una tetera, y los otros dos una bandeja con una gran cantidad de dulces, estas últimas hizo que mis ojos se iluminaron.

Al poco tiempo puede ver llegar al príncipe Gerald igual de rápidamente que la criada, mientras detrás de él los seguían tres mayordomos, uno llevaba una bandeja con una tazas y una tetera, y los otros dos una bandeja con una gran cantidad de dulc...

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Narrador Omnisciente

Al ya estar frente de la único mujer en el lugar, los tres mayordomos prepararon la mesa para la comida y el príncipe de cabello rubio se había sentado frente a esta.

-espero no haberte echo esperar- dice el chico ocultando su cansancio mientras le sonreía con su típica sonrisa a la menor.

-no, no, claro que no...antes fue mi culpa por venir sin invitación- dice la chica rápidamente distrayendo se de los dulces en la mesa y al momento tener los nerviosismos a flor de piel, y es que en solo pensar en molestar al contrario para simplemente tener una charla, no le daba mucha gracia.

Pero es que realmente no podía dejar de pensar en ese niño o niña que le daría su fin, y al ya no tener la atención de su hermano le hacia las cosas más difíciles de saber de quien podría ser.

-no te preocupes cuando es por tí, yo dejaría mi oportunidad del trono para simplemente hablar contigo- dice ahora con una tierna sonrisay mirándola a los ojos, dando a entender que no mentía, y es que momentos antes lo ubiera echo y lo volvería hacer si fuera el caso -detodas maneras es muy raro que tu vinieras a verme, puedo saber el porque?- dice ahora con una sonrisa juguetona mientras hacía una seña a los sirvientes para que ser retiraran.

-bueno yo quería saber unas cosas de ti- dice la chica volviendo su atención a la taza de té algo miedosa y muy nerviosa.

-¿saber de mi?- pregunta ahora interesado mientras olía la relajados esencia, menta, su favorito-¿que cosas quieres saber de mi?-

-tu sabes cosas simples- dice cogiendo una de las galletas de la bandeja, llevándose la a los labios mientras habla -como por ejemplo:...como te a ido....como están las cosas con la sucesión del trono....si piensas tener hijos- esta última lo dijo en un susurro con la galleta cubriendo su boca.

Claro que de todas maneras lo pudo escuchar el pelirubio y eso lo demostró botando el contenido de la taza a un lado, antes de ver a la menor incrédulo -¿co...como?- dice incrédulo antes de ver a la menor sorprendido.

-¿que, como te a ido?- dice más que nada nerviosa de que este estuviera enojado.

-no...lo último que me dijiste- dice ahora serio, pensando que de pronto el te pudo aver sido envenenado con algún alucinógeno.

Al ver que no tenía escapatoria suelta un suspiro cansado y así concentrar sus palabras -que si...piensas tener hijos- dice al final totalmente seria dando a entender sus palabras.

En ese mismo momento se creó un silencio incomodo en lugar, totalmente pesado y frío como si fuera un bloque de mantequilla sus estuvo congelado por siglos, o bueno eso antes de que el tercer príncipe cogiera con rapidez el tenedor y así enterrarlo con fuerza en su mano, haciendo que los dos gritaran por sorpresa.

-ahhg!~...esto...esto no es un sueño?- dice al final dándose cuenta de que efectivamente no era un sueño.

-no!...y eso realmente no duele?!- dice incrédula viendo al mayor con sorpresa, miedo y incredulidad.

-si!- responde a la pregunta cogiendo su mano lastimada antes de ver a la mujer con agora nerviosismo -y tu...¿y tu quieres?- pregunta ahora con nerviosismo mientras la seguía viendo.

-yo...pff~...si claro- dice mirando a otra parte totalmente sonrojado y nerviosa, esperando que el contrario no se si era cuenta de su mentira.

Y es que realmente no quería tener hijos, pensaba que todavía era muy joven para eso aunque en espíritu ya estuviera vieja. Aunque también era porque no creía poder cuidar de un bebé, ya que, de por si, su jardín le quitaba mucho tiempo, un bebe le quitaría el doble.

Más al parecer le había funcionado la mentira porque, el (todavia sorprendo) príncipe se había levantado apresuradamente y se había puesto de igual manera a su lado, arrodillado en el suelo, y extendiendo una mano a la menor

-si es así...Katarina Claes...me arias el hombre más feliz del mundo y te convertirías en mi...- en ese momento aparece los tres mayordomos de antes mirándolo con asombro, nerviosismo y miedo.

-principe Gerald!....principe Gerald!....principe Fetal!- dicen una y otra ves corriendo ante la pareja totalmente preocupado, pues momentos antes habían escuchado gritos de estos.

-¡¿Principe Gerald, que le paso en la mano- dice uno al ver la mano sangrante extendida.

-¡¿porque esta arrodillado?!- dice otro sorprendido y nervioso de que este se ubiera caído.

-¡será mejor que venga con nosotros príncipe, trataremos su herida!- dice el último acercándose preocupado para ayudarlo a parar, claro que apenas acercarse puede sentir como su cuerpo se congelaba de miedo al ver los ojos de su amo matarlo con la mirada.

Al ver como los mayordomos se quedaban congelados y ver la cara de miedo entre ellos Keratina piensa que la herida de Gerald, era más profunda de lo que pensaba por lo que con cuidado pone su mano en la mano lastimada para ver esta.

-sera mejor que los escuches príncipe Gerald, su herida no se ve muy bien- dice preocupada mientras ve como un pequeño hilo de sangre bajaba por la mano

Más tercer príncipe al sentir el tacto de su amada, siente como su cuerpo tiembla de placer antes de verla totalmente nervioso, quien diría que con un simple toque pudo sentir su corazón quería salir de su pecho. Por lo que sin más obedece levantándose con lentitud de suelo y asintiendo.

-ests bien...pero prometo que la próxima ves no me detendré asta decir lo que deseo- dice con cuidado y afecto asiendo ver una pequeña parte de ese amor que tanto le torturaba para estar con ella.

-esta bien...yo esperare ese dia-dice con cuidado y termina, antes de sonreírle.

Al final Gerard se va del lugar con esas palabras todavía alojadas en su garganta, prometiendo que la próxima ves que se encontrará por fin confesaros su amor.
Aunque lastimosamente Keratina no entendió esto, pensando que este solo había tropezado y deseaba que lo ayudará.

Gracias por leer y perdonen la demora.

HIJOS?! (Harem x Katarina) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora