Anne with an E

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El viento golpeaba las ventanas.

La luz que provenía de los faroles de la calle la iluminaban, a ella, a ella que luchaba por reprimir sus sentimientos, ¿pero como? ¡Como ella no iba a amar a la persona que se encargó de derribar sus muros uno a uno y verla por lo que realmente era, una humana vulnerable!, a la maravillosa persona que se instaló en el castillo de su corazón llenándolos de colores y música.

-Soltó una carcajada-.Y por fin ella, el alma que yacía sentada en el sofá lo entendió, entendió que la mejor parte de estar allí era no tener el control saber que en cualquier momento podía caer, caer y quizás no avanzar por años pero también podía hacerlo feliz y eso era el regalo más preciado.

Los mechones de cabello cayeron en su cara mientras las lágrimas mojaban su mejilla y se golpeaba el pecho.

-Yo te amo querido Gilbert

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