Kiss Of Death, Zero Two & Tú

03

Desperté con Zero casi en su totalidad sobre mí... Esto no es fácil.
La quité de encima con cuidado para no despertarla.

Fuí al baño a lavarme la cara, cepillarme los dientes y eventualmente hacer mis necesidades. Cuando Giré, Zero estaba ahí parada ¡Y yo orinando sin cerrar la puerta!
Salí sonrojado nervioso del baño.

-No deberías espiar a las personas.

Zero me Ignoró y entro al baño, solo que ella sí cerró la puerta.

Creo que hoy yo voy a cocinar ¿Panqueques o huevos fritos? Ya lo desayunamos el día anterior ¿Waffles? No sé hacerlos... Creo que ahora dudo de mis habilidades culinarias. Talvez deba preguntarle a Zero.

Me acerqué a la puerta del baño y toqué.

-¿Zero? Me preguntaba que te gustaría de desayuno.

Se escuchó como unas cosas se cayeron ¿Debo abrir? Podría haberse lastimado... Pero también simplemente.. ¡Al diablo, voy abrir!

-¡¿Estás bien, Zero Two?!.

Solo era mi cepillo de dientes que estaba en el suelo. Eso no quiere decir que no pasó nada. Lo primero que ví fué a Zero Two comiendo la pasta dental. Cuando me vió, hizo una expresión de desagrado por el sabor de la pasta.

-Esto no sabe rico.

Escupió los restos. No le dije nada, solo la llevé a tomar un baso de agua... Aunque pensándolo ¿Un baso de agua helada tras comer pasta dental? No parecía una buena idea.

-¡Esto está muy frío!.

Empezó a escupir el agua.

-¡No hagas eso y solo tómate esa Agua! Es por la pasta dental que comiste.

Término de beber y se sentó en la mesa. Abrí el Refrigerador para ver qué había... Que sorpresa, todo se terminó. Por suerte tenía lo que mis padres me dejaron antes de salir.

-Iremos al supermercado.

Ayer en la mañana todavía había cosas suficientes para el resto de la semana ¿Cómo es qué se acabaron? La única y obvio respuesta es que Zero las haya usado para su pasta de ayer... Supongo que no hay problema.

Fuí a mi habitación a ponerme una ropa más apropiada, también había pedido a Zero que se pusiera lo que quisiera del armario de mi madre.

"Muy bien, vámonos" después de decir esas palabras salimos de casa y caminamos al supermercado. Zero iba sujetada de mi ropa porque así se lo pedí, No quería que se perdiera ¿Pero no lo que quería era que se marchara? Supongo que me agrada. entre comidas tenemos buenas conversaciones sobre la Miel.

-Aquí estamos, Zero.

Estábamos frente al Supermercado. Zero miraba sorprendida lo Grande que era.

-¡Es gigante! ¿Aquí hay Miel?.

Asentí y eventualmente entramos... Agarré el carrito del mercado. Pasamos por todos los pasillos y compramos lo necesario.

Mientras caminamos, justo en ese pasillo, en el que según Zero no podíamos saltar, ahí estaba la persona más insoportable de toda la preparatoria y mi grupo.

Lo ví y di una vuelta de 180° y caminé al lado contrario. Zero no se percató y caminó hasta la Miel. Yo traté de detenerla.

-¡Zero!.

Ambos voltearon. Zero yo tenía dos frascos en sus manos, cuando ya estaba cerca los tomé y metí al carrito.

-¡Hey! ¿Cuento tiempo, Idiota?.

Así es, él es mi Bully, es la persona más insoportable que existe.

-Solo dos días. Vámonos Zero.

Me empecé a alejar... O eso traté.
Zero corrió para alcanzarme.

-¿Ha dónde vas?.

Me tomó de mi hombro. Zero al ver eso rápidamente tomó su mano con fuerza.

-Oye Belleza, no te querrás meter en problemas, y menos conmigo.

La apretó incluso más fuerte. Él empezó a retorcerse de dolor.

-Oye, ya no es divertido. ¡Suéltame, maldita perra!.

Todos miraron esa escena. Zero al notar eso lo soltó y se escondió detrás de mí.

-¡Eres un Demonio!.

Lo ignoramos y nos marchamos de ahí, ya teníamos lo que necesitamos, no había necesidad de quedarse ahí.

De cierta manera me siento patético e inútil. Zero fue la que me defendió, yo solo di pena mientras esperaba a que terminara todo.
En fin... Estábamos en la Caja para pagar todo. Compré más de lo usual, no sé si me alcance para pagar con mi mesada.

¡JA! Que suerte, sí fue suficiente por poco.
Zero Two y yo volvimos a casa sin problemas ni inconvenientes.
Fue un viaje callado, no podía sacar de mi cabeza que fue un Inútil total.
¿Cómo estará ella? No le pregunté, ella tampoco habló en todo el camino, incluso se vió desanimada para lo que es ella. No la conozco, pero sé de algo que podría gustarle.

-Ya es muy tarde para hacer el desayuno. Tendremos que esperar al almuerzo.

Busqué entre las bolsas de nuestras comprás y saqué dos cosas en específico.
Zero Two estaba sentada en el sofá cuendo viendo por la ventana de la Sala de estar.

Terminé de hacer lo que necesitaba y caminé hasta ella.

-Ten Zero, es para tí, creo que te lo debo.

Le di un plato con un pan totalmente bañado en Miel. Ella lo tomó gustosa y se lo comió en seguida.
Yo me había quedado sin algo que hacer, así que prendí la Televisión.
Un canal de concursos, nada especial.
Entre las secuencias de comerciales, uno en particular llamó mi atención, era un concurso de cocina. Las personas que salían en ese programa tenían que llamar a un número que aprecia en pantalla... Zero Cocina bien... ¡Tengo una idea! Desafortunadamente el comercial termino ¡Tendré que ver la televisión hasta que se repita!.

FIN...