Xiao Zhan, un estudiante universitario, quien estudia psicología.
Wang Yibo, un estudiante promedio y ejemplar, al igual que atractivo y perfecto ante los ojos de todos.
Un pequeño incidente hace que ellos dos se crucen y con el paso del tiempo, Z...
"¿Sí o si? , ¿quieres que ya entre?. Tu quieres estar estresado, yo prefiero tener sexo. Tu y yo y mi mente sucia, ¿podemos seguir calientes o no?" -Dirty Mind, Boy Épic.
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-¿Quién eres?. -Pregunté tembloroso, estaba asustado, pero una parte de mi le gustaba esto.
-No necesitas saberlo, tú lo descubrirás con el tiempo. Dejemos de perder tiempo y comencemos a divertirnos~
Después de eso, sentí como empezaba a tocar mis piernas, acercándose peligrosamente. Sus manos se sentía frías, eran grandes y algo rasposas; acariciando mis muslos, apretándolos y dejando marca de que yo era de el... solo de el...
-Perdóname porque lo que estoy a punto de hacer Zhan, pero es necesario para que recuerdes...
Después empezó a subir un poco más y llegar a mi cadera, acariciando y apretando, lamiendo y mordiendo. Todo me causaba placer y excitación; con cada beso subiendo, llego a mis pezones. Las cuales los apretaban y jugaba con ellos como si fueran gomitas de dulce.
Todo se repetía una y otra vez...pero...¿era real o lo estaba soñando?
-¿Esto es un sueño o es real?.-Le pregunte a aquella persona, pero cuando por fin recupere un poco más la vista, me di cuenta de quién era.
-¿Crees esto es un sueño?.Si así fuera, no sentirías esto-Contestó Yibo ante lo que le pregunte, pero cuando menos lo espere, sentí algo filoso cortar mi piel.
Esto provocó que soltara un sonoro gemido de dolor, pero más que eso, me excitaba. Su corte era limpio y preciso; sentía como empezó a lamer la cortada y dejaba chupetones en todo mi abdomen.
-¿Recuerdas algo al sentir estos cortes? , ¿sientes dolor o placer Zhan?...
En esa habitación solo podía escuchar mis gemidos y crujidos de la cama.
-Dime Zhan.-Hablo el.-¿Me recuerdas?...-No entendía porque me hacía esa pregunta. Pero aun así la conteste...
-No, solo siento como si me quemara por dentro, pero, ¿por qué haces esto?.-Lance otra pregunta.
-¿Por qué? Aun no lo recuerdas, pero con el tiempo recordaras todo de mi conejito, pronto...Pero porque no subimos más la intensidad a esto~
De la nada, el se paro y salió fuera de mi rango de vista. Era el momento para darme un respiro y pensar porque sucede todo esto...
Sin darme cuanta él había llegado y me observaba desde el marco de la puerta. Distinguía que tenía una tela roja en una mano y en la otra algo largo; no sabía que era esa cosa, pero era algo largo.
-Hoy jugares con esto pequeño, espero que la próxima vez nos divirtámonos aún más~
Camino lentamente hacia mi, con una sonrisa ladina y unos ojos penetrantes.
-Propongo algo, cuando sientas que estas en tu límite, di una palabra clave, ¿correcto?.-Dijo Yibo, no dañar con exactitud para que era la palabra, pero solo asentí.
-Vainilla, me gusta ese sabor de helado... ≪-
-Okey, comencemos con la verdadera diversión~
Sentí como tapaba mis ojos con aquella tela roja, apretada pero lo suficiente. Como acariciaba mi tracero y jugaba con mi entrada, sentí algo húmedo en esa zona y como Yibo introdujo uno de sus dedos.
Dolía y me excitaba, para después introducir otro dedo y penetrar aún más profundo. Sentía como una corriente recorría por todo mi cuerpo, era tan caliente esto...
Después de un rato los saco, dándome un pequeño respiro; pero sin esperarlo, introdujo algo en mi entrada. Llegando muy profundo y como tocaba ese punto sensible de mi, sentía como casi llegaba a mi entrañas y el dolor que era presente.
Pero se salió de mi control, esa cosa dentro de mi comenzó a vibrar, haciéndome gemir de placer y excitación. Sentía tanta vergüenza de que Yibo me viera así, pero no podía evitarlo.
Daba justo con mi punto dulce y el hecho de que vibrara era aún más placentero, gemidos de mi boca salían...
-Yibo~Hazme tuyo, Ahh~
Solo podía decir eso, mi juicio estaba nublado y no pensaba con claridad. Solo podía pensar en satisfacerme y satisfacerlo a él, pero no tenía tiempo de pensar en nada.
-Por favor~
De repente, dejó de vibrar y sentía que salía de mi, cuando pensé que esto había acabado, él entró en mi en una sola estocada. Haciendo que gritara, pero no podía evitarlo.
El hacia movimientos bruscos y rápidos, sin detenerse... Los choques de las pieles, los gemidos sonoros y el rechinar de la cama, todo era tan caliente y a la vez confuso. ¿Por qué dije eso? , ¿por qué dejé que él me hiciera esto?¿Por qué...?
Aumentaba más él movimientos, hasta que llegamos al máximo y nos vinimos al mismo tiempo...Terminado con un par de estocadas más y por fin quitarme las venda de los ojos y desatando mis muñecas y pies.
-Me perteneces Zhan...eres mío... solo mío...
Y eso fue lo último que escuche, para después desmayarme.
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