꧁༺ Capítulo VIII

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— Príncipe heredero, espero que pueda ayudar a la princesa con su educación. Dentro de un mes será anunciada como miento oficial por la asamblea, pero antes el consejo debe reconocerla. Debe estar preparada, estoy segura de que podrá hacerlo.

Dijo la anciana sonriendo de una manera muy sincera aún así Eun Bi no podía evitar sentirse insegura, no conocía absolutamente nada de la realeza, no presto atención en clase de historia y tampoco le interesaba aprender sobre personas que son mantenidas por el estado.

Solo tendría un mes para volverse una princesa, tenía ganas de desmayarse ahí mismo, por otro lado el príncipe heredero llevaba esa sonrisa divertida en su rostro alentándola.

— Su alteza haré lo que sea posible para ayudar a la princesa con su educación, podrá contar conmigo para cualquiera cosa y de hecho me apetece cabalgar mañana sería una oportunidad para enseñarle y mostrarle algunas actividades recreativas y culturales que podían interesarle.

La pequeña asintio algo emocionada por la idea de estaría pasando tiempo con la única persona de más o menos su edad en el lugar además de que podrían convivir como lo que son <<hermanos>>.

— Bien, mañana podría no asistir a clases para pasar el día con la princesa Eun Bi, después que sus lecciones con la Reina culminen.—

Una vez terminada la cena ambos se retiraron y Jungkook se prestó a acompañarla a su cuarto mientras charlaban sobre cosas triviales.

— Supongo que aquí nos separamos su Princesa real Eun Bi—

Dijo divertido ladeando un poco su cabeza mientras la pelinegra entraba a su cuarto, esta sonrió levemente e hizo una reverencia siguiéndole el juego.

— Buenas noches su alteza —

Le guiño el ojo derecho antes de cerrar la puerta por lo menos durante las noches podría vestirse por su propia cuenta. Al estar con su fino vestido de seda se dejó caer sobre la suavidad de su colchón, quedándose dormida casi de inmediato.

Por otro lado el castaño regresaba al otro palacio pensativo, la chica tenía un rostro adorable y actitud encantadora, haría lo posible para que se sintiera realmente en familia al parecer sin la presencia de la reina se le notaba más relajada pobre se ella no sabía lo que le esperaba.

•••

Otro día comienza donde la princesa es despertada por sus sirvientas, esta vez logran hacerlo con pocos intentos, Eunha no quería perjudicar a las chicas sabiendo que si no estaba despierta a tiempo la reina se molestaría con ellas, era demasiado incómodo tener que ser vestida por otras personas cuando perfectamente podía arreglárselas sola ¿También hacían eso con el príncipe? Cruzó rápidamente por su cabecita

Ya vestida con ropa y peinado tradicional fue escoltada hacia su estudio donde le esperaba sentada la reina, sobre la mesa había un juego de té, imaginaba que esta sería una clase de modales.

– Temporalmente nos olvidaremos de las lecciones de Chino tradicional para enfocarnos en etiqueta y protocolo ya que su presentación al público ha sido adelantada.

Anunció invitándola a tomar asiento frente a ella para comenzar la clase.

– Si su alteza...

Respondió mientras tomaba asiento observando los delicados movimientos de la contraria, cuando llegó su turno trató de imitarlos lo más exacto posible sin lograr ganar su aprobación la mujer quería perfección no esfuerzo.

Fueron varias horas las que tardaron ya que la memorización no era la mejor de las habilidades de la pequeña princesa, finalmente llegó su hora de descanso a petición de la reina madre, anciana de la familia, de ser por su nuera sin siguiesen trabajando arduamente. Y Justo a esa hora el príncipe heredero se encontraba en el umbral de la puerta esperándola, esta se levantó un poco apresurada después de haber pasado horas siendo regañada.

— ¿Como te ha ido?—

Pregunto mientras caminaba a su lado, su rostro era bastante expresivo lo entendió todo solo con mirarla de reojo.

— Lo se complicado pero ya lo vas a conseguir, solo trata de que no se enfade —
Esta lo miro con el ceño levemente fruncido para luego decir:

— Es imposible, soy un desastre no nací para ser princesa aunque mi ADN demuestre lo contrario —

Una vez en el patio tomaron asiento a la espera de que sus sirvientes trajeran los caballos.

— No se nace de esta forma se hace Eun Bi, no te desanimes estoy seguro de que para final de mes serás toda una princesa y yo te ayudaré. Di mi palabra y pienso cumplirla—

Una tos fingida se escuchó detrás de ambos captando su atención, era el consejero del príncipe con los caballos listos.

— Ahora su alteza... ¿Me concedería el honor de dar un paseo a caballo con usted? —

Sonrió divertido mientras hacía una leve inclinación.

— Por su puesto su alteza —

Respondió siguiéndole el juego, fueron juntos hacia los cabellos y Jungkook dejó a la menor escoger cuál de los dos montaría.

— Damas primero —

Dijo haciendo un ademán como si tuviese una bandeja en mano con ambas opciones.

— Uhmm... ¡Este! —

Señaló a un caballo de pelaje negro azabache y se acercó para acariciar su suave y brillante pelaje, un sirviente colocó la montadura para ella, trató de subir por su cuenta pero la diferencia de altura entre el animal y ella era muy evidente.

Uno de sus servidores iría por un banco para ayudarla a alcanzar el lomo del animal pero en vez de eso Jungkook sujeto su cintura con firmeza colocándola adecuadamente sobre el asiento.

— Oh gracias... —

Dijo apenada este solo hizo un gesto con su mano para luego subir a su caballo y de inmediato comenzar a instruirle cómo cabalgar.

Estaba muy asustada pero al hacer las cosas como le fueron indicadas perdió el temor haciéndolo con más confianza, al ver que el castaño incrementó la velocidad ella decidió imitar su acción divirtiéndose al sentir la brisa golpear su rostro.

Inesperadamente el caballo comenzó a salirse de control, no entendía porque si solo estaba haciendo lo que miraba, se aferraba a este asustada de caerse, Jungkook la vio alarmado y trotó hasta ella.

— Salta yo te atrapo —

Eun Bi lo miro con miedo negando pero con la mirada le transmitió seguridad, cerró sus ojos y dejó su cuerpo caer hacia delante siendo rodeada por los brazos del mayor quien logró acunarla sobre su regazo, esta escondía su rostro en su pecho por el susto que había recibido.

También podía escuchar como el corazón de Jungkook latía de manera acelerada.

Primero que nada felices fiestas. Esta fue una temporada un poquito difícil para mi pero ya estoy devuelta trataré de actualizar a tiempo muchísimas gracias por apoyarme y demostrar que les ha gustado mi historia. 🥺💕

Time For The New Princess (Eunkook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora