Otro trabajo

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El azabache llego entro sin tocar a la oficina de su tío en donde tenía un sobre en la mesa y su amigo rubio bebía una cerveza.

-¡Teme! Que bueno que llegas, olvidé que tienes auricular- Se toco la nuca nervioso.

-Como sea, habla-

-Sasuke, tenemos un trabajo nuevo- Soltó Madara tranquilo.

-Habla más- Pidió con obviedad pero por dentro no quería que le arrebataran el trabajo que tenía en ese momento.

-En una semana llegara un Coreano a la Cuba, específicamente la Habana. Tienes que eliminarlo- Explicó Madara.

-¿Qué pasará con mi actual trabajo?- Pregunto intentando fingir desinterés.

-La llevarás contigo-

-P-pero Madara-sama ¿no es peligroso?- Preguntó Naruto.

-Si Sasuke es cuidadoso no. Sería más normal ver a una pareja de recién casados de viaje a que vaya solo- Expuso el mayor de los Uchiha.

-Bien, lo haré pero antes de irme quiero algo- Estaba avergonzado de pedirle eso a su tío pero si iba a algún otro lugar se podían enterar y si lo hacía con Karin debía informar a su tío.

-Dilo-

-Quiero una vasectomía- Dijo firme el ojirojo mirándolo.

-Vaya Sasuke, veo que con tu boda estás más activo por ese lado- Río Naruto divertido mientras Madara intentaba ocultar su risa.

-Sabes que puedes tenerla pero, ¿por qué?- Preguntó curioso.

-Ella quiere hijos y si le digo que no comenzará a sospechar, además, no hemos tenido nada- Se avergonzó un poco por lo que acababa de decir pero era real.

Luego de eso se dirigió con Karin para que procediera con la pequeña cirugía y para que le extraerá las reservas de semen, por si acaso la pidió reversible.

Por su lado la ojiluna no le hizo caso a su esposo y se quedo en la cama esperándolo, todo había sido muy extraño y no se sentía nada bien.

Se asomó en la mesa de noche del azabache y noto el estuche de sus lentes de contacto. Ella sabía que usaba,ya que, sufría de miopía.

Un impulso la hizo abrir la pequeña caja y lo que vio la dejo en algo confundida. Era lentes de contacto negros como la noche, no tenían ningún tipo de aumento o modificación para corregir la vista, simplemente eran negros.

Luego de unas horas escucho la puerta principal abrirse y corrió a ver a su esposo, que se dirigía a la habitación entre la oscuridad.

-¿Cómo te fue?- Preguntó ella con su normal sonrisa.

-Bien, pero vengo cansado, a dormir- Dijo sin dejar de caminar.

Al entrar a la habitación Sasuke apago la luz y sin parar de caminar llego a la cama y comenzó a sacarse la ropa.

Hinata aún debía comprobar algo así que fingió caerse cerca del marco de la puerta.

Sasuke corrió a ella y con un rápido movimiento encendió la luz y se agacho para ayudarla.

-¿Estas bien?- Le extendió la mano para ayudarla a levantarse, pero se dio cuenta que al ella levantar la cabeza y mirarlo quedo en shock.

Hinata no podía creer lo que veía, su Charasuke con los ojos rojos como la sangre, más penetrantes que cualquier mirada oscura.

-Tus o-ojos...- Dijo sin poder quitarle la mirada de encima.

El Uchiha de inmediato se percato de lo ocurrido, había salido tan rápido que no se había dado cuenta que no se puso sus lentes de contacto.

Trabajo fallidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora