Namjoon frunció el ceño al escuchar a Jungkook.
—No puedes hacer eso, Jungkook.
El menor lo miró, confundido.
—¿Y por qué no?
—Tal vez porque... ¡es ilegal tener a una persona secuestrada! —Namjoon se alteró, alzando las manos, rojo de ira, deseando golpearlo en ese momento.
—No lo secuestré —respondió Jeon, como si fuera un tema trivial.
—Lo tienes encerrado en una habitación sin ventanas y con la puerta cerrada con candado —dijo Namjoon, exasperado. Jeon lo miraba sin captar realmente el punto de la discusión. Para él, todo estaría bien si tuviera a Namjoon en lugar de Taehyung. En ese caso, tendría un motivo de pelea.
—Da igual, no hay pruebas de que fue así —se defendió Jeon.
—Dijiste que era un niño mimado —replicó Kim, dándole un trago a su cerveza.
—Sí, también dije que odiaba no tener lo que quería —dijo Jungkook, llevándose las manos al cabello y deslizando los dedos hacia atrás.
—Lo reportarán rápidamente como un secuestro.
—¿Cómo estás seguro de eso? —Jungkook lo miró con las cejas alzadas, sin tomarse en serio nada.
—Un estudiante responsable —dijo Namjoon, alzando un dedo—. Hijo mimado —alzando otro dedo—. Nunca ha salido con nadie —alzando un tercero—. Fuiste el único visto con él y no tienes la mejor reputación. ¿Quieres más razones? —dijo, levantando un cuarto dedo.
—¿Y qué con eso? —replicó, algo molesto. Namjoon le lanzó una mirada inquietante.
—¿Crees que está bien lo que hiciste? —Los dos se miraron durante unos segundos. Esa pregunta hizo reflexionar al menor. En realidad, no se sentía culpable en absoluto; se sentía más feliz. ¿Y cómo no, si tenía a Taehyung solo para él, cada día y cada segundo de todo el bendito día?
—Estoy perdiendo el tiempo contigo —dijo Namjoon, levantándose de la silla. Kim alzó una ceja, indignado, apoyando los brazos en la mesa redonda frente a él. Al ver que el menor no regresaba tras pasar la puerta, comenzó a llamarlo varias veces tan fuerte como pudo. Después de unos segundos, Jungkook volvió.
—¿Cómo sabes tanto de él? —dijo curioso, con una pizca de celos, mirando seriamente a Kim.
—Jimin —dijo simplemente Kim. Cuando iba a agregar algo más, Jungkook le dio la espalda nuevamente y se alejó, murmurando molesto: "Maldito Park bocón".
Jungkook caminó hacia la vieja puerta de hierro al final del largo corredor. Se detuvo, abrió el candado y luego la puerta rápidamente. Sobre la cama de madera, una figura tierna estaba acurrucada, con las piernas recogidas en los brazos y el rostro escondido entre ellos. Jeon se acercó; Taehyung ni siquiera se movió. Eso le pareció extraño.
Poniendo una mano en sus cabellos y apartándolos a un lado, se dio cuenta de que estaba dormido. Ver sus largas pestañas posadas en sus mejillas abultadas por el colchón le derritió el corazón. Una sonrisa deslumbrante se instaló en sus labios.
Jungkook cerró la puerta, luego se sentó en la cama, observándolo. Desde su extensa cabellera hasta sus coloridos y llamativos tenis, algo raro pero tierno para Jeon.
Acarició tiernamente la cara de Tae, llegando a su nariz respingada, la cual apachurró ligeramente. Tae arrugó las cejas, estiró las extremidades y se acostó de espaldas. No duró mucho en esa posición; volvió a acostarse de costado. Jungkook, al analizarlo totalmente, se dejó caer de costado en el colchón, quedando frente a frente con él. La respiración de Tae golpeaba su rostro; era cálida y tranquila, relajándolo hasta que cayó dormido.
No pasó mucho para que Jeon rodeara con un brazo la cintura de Tae, quien se acurrucó en el pecho del mayor.
Mientras tanto, en la ciudad, cientos de letreros buscaban a un estudiante e hijo ejemplar. Un amigo preocupado, varias personas ayudando y unos padres deshechos recorrían la ciudad sin descansar, buscando por todas partes al joven desaparecido de veinte años.
{Estoy hasta las enawas de la tarea 😭
Espero que les gustara el cap.
Besos en el * 😚😙😘}
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BAD HABITS -Kookv [Terminada]
FanfictionJungkook era conocido por ser un drogadicto, malhumorado y desvergonzado de un pequeño barrio de Seúl, uno peligroso. Era una plaga para las personas serca de ese lugar. Por lo que el barrio quedó solitario, si no fuera por la bola de vagos que le h...