"No quiero morir, no estoy lista para hacerlo todavía. En este momento solo estoy segura de una cosa y es que te amo sin importar como vaya a terminar todo esto, voy a hacerlo hasta la muerte, en esta vida y en la otra"
Como dijo Albus Dumbledore a...
"No somos, no, no somos amigos Nunca lo hemos sido"
...
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Me encuentro en la enfermería junto a Lily, estamos haciendo nuestros deberes. Sam todavía sigue inconsciente, pero madame Pomfrey dijo qué tal podría despertar hoy.
—¿Estas en la clase de artes cierto?—pregunta Lily, levanto mi vista de los deberes y la miro.
—Si, me parece interesante el arte—bajo mi mirada escribir, estoy haciendo mi tarea de astronomía.
—A mi la adivinación, estoy aprendiendo a interpretar sueños—la vuelvo a mirar, veo cómo me sonríe—Podrías contarme uno tuyo y tal vez te diga lo que significa.
—Creo que ni la profesora Sallow podría saber interpretar uno de mis sueños—rio, ella también lo hace.
—¿Y que has aprendido en la clase arte?— pregunta dejando su pluma a un lado, apoya su mento con su mano.
—A apreciarlo, el arte muggle puede ser bastante fascinante —digo, ella asiente con la cabeza.
—Al parecer ahora todos los de la casa adoran a tu hermano, es sorprendente todo lo que le a llegado—dice Lily haciendo un movimiento de cabeza en dirección a las cosas.
En estos días a Sam le ha llegado comida y regalos, incluso podría decir que en todos esos puede que haya una Amortentia por ahí, extrañamente ahora a las chicas les parece atractivo mi hermano. Al parecer no fue tan malo que lo golpeara esa bludger después de todo, solo bromeó.
—Sam es toda una estrella— rio —No creo que le moleste un poco si vemos que cosas le han traído.
—Eso es de Sam, Ophelia— me mira Lily.
Puedo oír pisadas, me volteó hacia la puerta y puedo ver a Remus entrar, puedo ver que trae algunas cosas.
—Hola chicas—nos sonríe, en la parte vacía de la cama de Sam deja comida—Traje esto para ustedes.
—Gracias — le sonrió.
—Esto me lo entregaron un par de chicas en el pasillo— me muestra unas cajas—Me dijeron que por favor se lo diera a Sam.
—Vaya —elevo mis cejas—Déjalas por allá.
Le señaló la gran montaña de regalos qué hay sobre una mesa.
—Wow ¿le enviaron todo eso?—pregunta Remus junto a la gran mesa—Si que es un estrella.
—Luego de esto el ego de Sam llegará hasta las nubes—lo miro.
—Tal vez yo también vaya a las pruebas para entrar al equipo—bromea Remus, veo cómo acerca una silla y se sienta junto a nosotras.
—Eres genial Remus —le dice Lily mirándolo— No como James.
