La Esposa De L (L y Tu)

|Capitulo 6: Oliver|

Oliver: (este examen, es algo difícil, parecen ser problemas de universidad, de grados superiores) —se dijo mientras jugueteaba con un lápiz con su mano derecha— (si Kenji estuviera aquí seguramente lo entendería, creo que él está en un grado supero, me pregunto si está estudiando la carrera que quería, o estará estudiando la que su padre eligió para él) —recargo su cabeza sobre la palma de su mano mientras cerraba los ojos— (posiblemente por eso se mudó a Tokio)

—Indaga mucho en las preguntas, ¿no lo cree? —cuestiono un profesor del orfanato a el hombre mayor mirando al de cabellera negra

Rogers: tal vez solo está pensando sus repuestas —susurro mirando como el chico abría los ojos y contestaba la última pregunta

Oliver: disculpen —levanto la mano llamando la atención de los hombres— ya terminé

—Está bien, dame tu examen, yo lo revisare —el de ojos grisáceos le dio las hojas mientras se levantaba de su asiento

Rogers: ¿difícil? —cuestiono sobre el examen al menor, cuando este se encontraba a su lado

Oliver: algo así, el examen tenía algunos problemas que nunca había visto

Rogers: te dimos un examen de grado superior a tu nivel, entiendo que no conocieras algunas fórmulas de matemática, dime ¿tu madre nunca ha intentado enseñarte problemas de nivel superior? —pregunto caminando fuera del salón de clases

Oliver: mi madre nunca está en casa

Rogers: lo lamento

Oliver: no hay problema, ya me acostumbré a estar solo o con mis amigos

Rogers: comprendo. Aquí tienes, consérvala bien —extendió una hoja de papel al menor— mientras hacías el examen, le pedí a alguien que hiciera el rostro de tu padre

El de cabellera negra tomo la hoja para mirarla, en él se encontraba un hombre con una cabellera muy desordena y rostro serio. Entre abrió la boca y función el ceño, al llegarle un leve recuerdo del sujeto

Oliver: oh... gracias —agradeció, mirando fijamente el rostro de su padre, se parecían un poco, pero no como Rogers o mamá decía, o eso es lo que él veía— bueno, supongo que tengo que irme, gracias por la ayuda —dijo caminando hacia un pasillo que daba a las escaleras

Rogers: ¿tu madre no vendrá por ti? Mucha gente no viene por estos lugares, es por eso que el autobús no pasa mucho por aquí, más que para llegar a la ciudad que está cerca

Oliver: eso explica porque algunos no querían traerme por aquí. Vivió en la otra ciudad, la que está a dos horas de aquí

Rogers: entonces deberías llamar a tu madre, además quiero hablar con ella

Oliver: ah... ella no puede venir está trabajando —no mentía, pero aun así no pudo evitar ponerse nervioso

Rogers: entonces quien vendrá por ti

Oliver: esta bien, puedo caminar hasta la ciudad más cercana y pedir un taxi o algo así —indago en sus palabras mientras alzaba los hombros

Rogers: ¿seguro?, lleva más de media hora ir caminando hasta la ciudad, ínsito en que llames a alguien

[. . .]

Oliver: ¿hola? —cuestiono llamando alguien desde el teléfono de la oficina de Rogers

Mello: ¿Oliver?, ¿Qué pasa?, ¿no deberías estar en la escuela? —cuestiono haciendo reír al menor

Oliver: te vas a reír cuando te lo diga, pero ¿puedes venir por mí?