; silentium - chanin

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Los textos que tengan estos <<">> son para cuando Channie diga algo y los en negrita son para los pensamientos.

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𝐃𝐄𝐉𝐀 𝐕𝐔𝐒

El pelirrojo miraba atentamente al chico de cabello rubio, siguiendo con la mirada cada uno de sus movimientos, le gustaba la forma en la que movía sus manos y hacia las señas, articulando sus dedos.

Era interesante. A decir verdad Jeongin siempre quiso aprender el lenguaje de señas, aunque sea para entender.

Hubo una época en específico en el cual su mayor deseo era aprenderlo, pero no recordaba muy bien la razón. Sólo recordaba el sentimiento de tristeza que lo invadía cuando su madre le negaba la enseñanza.

"Mi niño, no sé cómo puedo enseñarte"

No es que su madre no tuviera la posibilidad económica, siempre tuvieron una estabilidad muy buena pero su madre no era capaz de levantarse.

Eso era algo que le afectaba un poco, y hasta el día de hoy, su madre era maravillosa y no se merecía nada de lo que le había sucedido pero seguía sonriente y mimosa con su familia, era algo que agradecía.

Y entre todo su pensar logró ver como Chan sonreía, como sus ojitos se cerraban creando dos líneas arqueadas y bonitas. Se derritió, por completo.

Con un suspiro siguió mirando como el mayor sonreía cada vez más pero de un momento a otro esa sonrisa se esfumó y una expresión de tristeza yacía en su lindo rostro.

Chan había intentado reir pero por obvias razones no pudo, y eso lastimó su corazón.

Jeongin lo miró, la sonrisa había desaparecido, unas ganas de ir y abrazarlo se instalaron en él y dentro de su necesidad sintió que eso ya lo había presenciado, como un deja vu.

La necesidad de ir a mimarlo y decirle que no debía sentirse mal, que él era perfecto sea como sea fueron muy grandes, y bastante conocidas.

Últimamente tenía muchos deja vus, ¿qué sucedía?

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Chan bajó la mirada, jugando con sus largos dedos con vergüenza. Seungmin contó una anécdota bastante chistosa, donde su infancia era la narrada y sus amigos de ese entonces eran los involucrados, sintió tanta gracia que quiso soltar una caracajada pero lo único que logro fue una gran sonrisa sin sonido, dejándolo avergonzado por pensar en la imagen tan tonta que dejaba ver.

-Hey, Channie, no te sientas mal. Estas cosas pasan, pero no por eso debes avegonzarte por que yo nunca me burlaria de esto.

El rubio miró a su mejor amigo con ojos acuosos y brillosos, a punto de estallar de la impotencia. Intentando comunicarse movió sus manitas y dedos, creando palabras que personas como él y las que lo practicaban o aprendían entendían.

"¿Pero qué pasa con las personas que se burlan?" — dio a entender Chan en lenguaje de señas.

–Personas estúpidas existen, no les tomes importancia. Tú sé como quieres ser, sin importar si a ellos les parece gracioso, tú vive tu vida, no intentes cambiar nada de ti sólo para agradarles, con una actitud falsa no logras absolutamente nada más que amistades de la misma forma. Falsas.

— Aconsejó Seungmin, tomando las palidas manos del mayor con delicadeza, intentando transmitirle confort con sus palabras.

"Gracias" — Chan le dio una sonrisa a su amigo, la cual fue devuelta.

Seungmin miró alrededor del campo verde de la universidad, dándose cuenta de Jeongin, con lágrimas en los ojos y sollozando.

—Jeongin está llorando — avisó el menor de los dos amigos, Chan miró hacia la misma dirección que Seungmin.

"¿Qué le pasará?" — preguntó el rubio, Seungmin se encogió de hombros levantándose de los bancos de la mesa en la que se encontraban. Chan lo miró confundido y jaló de su camisa para obtener su atención —"¿Qué haces, a donde vas?"

— Iré con él, parece que necesita a alguien — respondió.

"Ni siquiera te conoce"

— A veces es mejor la compañía de un desconocido — dio por finalizada la conversación y camino hacia el pelirrojo sollozante.

Chan no queria estar sólo, se sentía desprotegido y no le gustaba las miradas de la gente que sabía de su discapacidad así que corrió detrás de su amigo, jaló un poco la camisa del menor para que el contrario se diera cuenta de su presencia y de que lo seguía de cerca.

Al llegar a Jeongin Seungmin se sentó a su lado, Chan sólo permaneció de pie frente a ellos.

— ¿Sucede algo? ¿Podemos ayudarte? — Jeongin en ningún momento miró a la dirección de las personas, sólo nego — ¿seguro? — insistió

— No pasa nada, de verd... - levantó de la mirada, quedándose perplejo al ver a la persona parada frente a él, eso sólo empeoró las cosas y soltó a llorar más.

Chan entró en pánico, nunca le gustó mirar a las personas llorar así que miró a su amigo para que hiciera o dijera algo.

— Hey, tranquilízate.

— N-no puedo~— sollozó más.

—¿Por qué?— cuestionó el azabache.

— P-porque él est-tá aquí — señaló al frente aún con el rostro escondido entre sus manos.

Chan se señaló aún más confundido.

— Puede irse si lo deseas.

— ¡N-no! — negó el menor, avalanzandose sobre el rubio, abrazandolo fuertemente sin intenciones de dejarlo.

"¿Qué le sucede?" — cuestionó Chan a Seungmin, el mencionado se encogió de hombros aturdido por las acciones del pelirrojo.

Chan no hizo más que darle caricias al menor, así como lo hacía cuando su hermana se sentia mal.

Aún se preguntaba por que Jeongin era tan... especial.

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Intentare actualizar dos cap cada día u.u