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[☁️]
𝐕𝐎𝐙

Después del emotivo reencuentro los chicos se vieron obligados a separarse ya que las clases debían ser retomadas.

— Debo irme chicos, tengo clases— avisó Jeongin, como no queriendo irse. —¡Ah, ¿por qué tenía que sonar la campana?! — se quejó haciendo un puchero mientras se cruzaba de brazos.

Chan rió por la actitud infantil y tierna del pelirrojo, justo como recordaba al dulce niño peliazabache y curioso de su niñez, el único niño que había querido ser amigo suyo y que no lo rechazaba.

Recuerda el dolor que sintió al dejar a su pequeño y único amigo en ese entonces, aún más dolido quedó al irse lejos de su lado habiendo discutido un día antes de su partida.

Recuerda que no sabía cómo decirle a su amigo "Yeye" que se iría de la ciudad debido a que su abuela había sido diagnosticada con alzheimer y debían estar al pendiente de ella. Su mejor (y la única que se le había venido a la mente) alternativa era causar una pelea entre ellos, en su mente infantil era la mejor opción que Jeongin se enojara con él y así no tendria que ver al niño llorar y rogarle que se quedara.

Por que una de las cosas que Chan odiaba era ver a Jeongin llorar.

Así que, a los nueve años supo el significado del dolor. Sintió por primera vez un vacío en su corazoncito y lloró todo el transcurso del viaje, sentia su corazón oprimirse cada vez que recordaba a su amiguito sonreír. Era una de las personas más importantes en su vida.

De hecho, gracias a eso le tuvo un pequeño coraje a su padre ya que por culpa de su trabajo se había separado de Jeongin, aunque luego lo entendió.

—¿P-podrías darme tu número de teléfono? — preguntó Jeongin tímidamente.

Chan asintió y sonrió, extendiendo su mano para que el menor le diera el móvil y agendar su número.

—Ahora deberían besarse— dice Seungmin de la nada, dejando perplejos y sonrojado a los dos chicos que segundos antes se sonreían.
—Digo, celebrando el reencuentro.

Chan lo mira mal y Jeongin sólo logra sonrojarse hasta las orejas.

—A-ahora sí debo irme, adiós hyungs — Jeongin se inclina un poco y sale apresurado hacia su clase.

Aún sin creer que se había reencontrado con el chico que fue tan relevante en su niñez y el que, aunque suene mal, le causó tantas lágrimas.

Tampoco le cabía en la cabeza como el chico en el que había puesto sus ojos y atención hacía más de un mes fue su mejor amigo en la infancia.

Inconscientemente sonrió y entró a su aula, donde varios de sus compañeros ya se encontraban.

[⭐]

—¿Qué?

— ¿Tu mejor amigo? ¿De niños? — habló esta vez Minho, sorprendido.

Hyunjin se desplomó en el sofá del menor, soltando una larga exhalación y aún en "shock", aunque Jeongin sabía que sólo lo hacía porque era una dramático en potencia.

— Sip, el mismo niño—dijo el pelirrojo, arrugado la nariz en un gesto de felicidad.

—Woah— Minho se acomodó —ahora deberían ser novios.

—¿Por qué todos de la nada intentan emparejarnos? — cuestiona Jeongin ruborizado.

—Por que estás perdido por él y aún no te das cuenta — Hyunjin se encogió de hombros.

—Concuerdo con mi querido Jin — secundó Minho, pasando un brazo alrededor de los hombros del menor.

— No me toques. — Minho obedeció de inmediato.

— No lo estoy, para nada. se defendió Jeongin.

— ¿Seguro? ¿Qué hay de esa vez que saliste corriendo cuando te llevamos con él?

—Simple vergüenza — respondió

—¿Y en el parque? Te pusiste nervioso cuando él estaba cerca de nosotros y cuando te encontré estabas viendolo como un acosador, tan pendiente a lo que hacías.

—Sólo me conmovió la escena, estaba con su hermanita y eso es realmente tierno. Sabes que los niños son mi debilidad.

—Claro, sigue intentando convencerte
— dijo Hyunjin — Recuerda que si logras no tener ningún tipo de gusto amoroso hacia Bang ganas la apuesta y tendrás nuestro respeto absoluto.

—Y un álbum de 2PM— recordó Minho, sonriendo cómplice.

—Pero-

—Yo diría que te te hagas a la idea de no tener ni nuestro respeto ni ese álbum.

— ¡Yah, hyung! ¿tan poca fé me tienen? — cuestionó enojado

—¡Mira que cosita tan linda!, te vez demasiado tierno haciendo pucheros, agugu— exclamó Lee, abriendo la
puerta del hogar del menor, dispuesto a irse con Hyunjin.

Y finalmente la puerta fue cerrada gracias a que los mayores habían huido, no querían herir los sentimientos del menor diciéndole que, efectivamente, no le tenían ni una poquita de fé.

—¡Sí voy a lograrlo, hyungs tontos!

¿Por qué tan seguro?

[🍑]

puede que hoy día publique más de dos capítulos ya que decidí que voy a hacer mis tareas en la tarde kdkcnd

; silentium - chaninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora