𝗯𝗹𝘂𝗲 𝗯𝗲𝗮𝗿 ♡̸ chansung

OO - 𝙄𝙉𝙏𝙍𝙊𝘿𝙐𝘾𝙏𝙄𝙊𝙉˖ 𓂃

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El pequeño de mejillas esponjosas abrazaba su nuevo osito, ésta vez era de color azul. Aunque Jisung ya tenía once años, su contextura física era pequeña. Fácilmente podías confundir al chico con un niño de ocho años. Y más si ponías atención en su aniñada actitud.

Le agradeció dulcemente a su madre y la vió salir por la puerta, oyendo las palabras de la mujer con atención.

"iré a buscar a la abuela, papá se quedará en casa"

El más pequeño de los Han, jamás pensó que aquella sería la última vez que vería a su madre, que el día de su cumpleaños sería también el día del fallecimiento de su progenitora.

Desde ese día, Jisung deseaba con todas sus fuerzas que el 14 de septiembre desapareciese del calendario.

Pero, cuando Changbin llegó a su vida tres años luego, éste no dudó en apoyar a Jisung y acompañarlo todos los años a la tumba de su madre. De abrazarlo y dejar que su hermanito se descargue por medio de las lágrimas.

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Changbin observó el retrato que tenía en manos y no demoró en azotarlo contra el suelo.

Acababa de entender el por qué su padre no era alguien presente en su vida.

Tenía otra familia, una mujer y tres hijos. Sí, tres.

Pero se había olvidado de su primogénito y su primera esposa.

Tenía apenas catorce años cuando descubrió aquello.

Y el veneno inundó cada célula de su anatomía.

Lo odiaba.

Si bien había llegado a la otra casa de su padre fue porque, siguió al hombre cuando éste iba a "su trabajo".

Y sí, se había ido a trabajar. Pero no sin antes pasar por su segunda casa a simular ser el mejor padre del mundo, de esos que llevan a sus hijos al colegio y a su esposa al trabajo.

Y una mierda.

Changbin había quedado solo en aquella casa que, era mil veces más lujosa que la suya. Mas eso no era lo que le importaba. Lo que a él le dolía era que, ésta casa estaba llena de vida, era un verdadero hogar.

Furioso rompió todo lo que pudo, manchó cada blanquecina pared y tumbó todos los cuadros que vió.

Meses luego, sus padres se habían divorciado.

Y años más tarde, su madre encontró a un hombre que sí lo valía.

¿Lo mejor de todo? Ahora él tenía un hermanito y un padre que sí lo quería.

ʚ a c t u a l i d a d ɞ

La señora Seo, madre de Changbin y madrastra de Jisung, charlaba animadamente con su esposo, el padre de Jisung y padrastro de Changbin, cuando se oyeron gritos desde la planta alta.

"¡Seo Changbin, voy a matarte!"

━¿Y ahora por qué pelean?━ cuestionó Soojin, obteniendo un simple movimiento de hombros por parte de su esposo.

━nuestros hijos siempre pelean por estupideces, se gritan y ninguno es capaz de golpear al otro. Siquiera hay que preocuparnos.━habló ahora Seonghwa, bebiendo un par de sorbos de su taza de café.

Y aunque los gritos se les hicieron menos audibles, los hermanos seguían peleando, solo que en la habitación de Jisung, la cual estaba bastante alejada de donde estaba el pasillo que se dirigía a las escaleras.

━Si mi osito azul no aparece te juro que te voy a arrancar las pelotas.━decía el peliazul mientras revolvía los cajones de su cómoda, intentando comprobar que Changbin no lo hubiese escondido allí.

━¿cómo es que al playboy de la universidad le molesta tanto la falta de un peluchito? Joder Jisung, tienes una estantería llena ahí.

Han hizo oído sordo a aquello y mientras buscaba su preciado oso de felpa, le hacía mil preguntas al pelinegro detrás de él.

"¿Donde está?" "¿Lo haces solo para molestar, verdad?" "¿Lo tiraste?" "¿Acaso lo rompiste?"

Y muchos más cuestionamientos tuvo que soportar Seo, hasta que, se hartó y gritó:

━¡Se lo regalé a Félix! Ya deja de joder y cállate.

━¿¡Que hiciste qué!?━cuestionó furioso mientras se daba la vuelta de forma brusca y se acercaba al mayor.

━Mira, cumplíamos dos meses de estar en pareja y lo olvidé totalmente. Asi que, recordé que cada que venía decía que le gustaba tu peluche y se lo regalé.

Changbin explicó con suma tranquilidad mientras Jisung estaba al borde de explotar en furia.

━Voy a comprar otro, sin que Félix lo note, lo cambio y te lo devuelvo...pero no me pegues ¿sí?

Han tenía la mano pesada y Seo lo sabía a la perfección, asi como sabía que no debía tocar las cosas de su hermanito pero, aquel día creyó que podría conseguir otro osito al instante, antes de que su hermano notase la falta. Pero no fue así, parecía que aquellos osos se habían agotado en toda la puta ciudad, mas Jisung no necesitaba saber eso aún.

El peliazul estaba por responderle pero su madre irrumpió en la habitación, emanando tranquilidad y pasando uno de sus brazos por los hombros de Changbin.

━Mis bebés, si siguen discutiendo van a llegar tarde a la universidad. Así que, se callan, toman sus cosas y se van los dos.

Aunque su madre hablaba con calma, sabían que el que la pelirroja estuviese en la habitación de uno de ellos, no era bueno. Porque su madre era un angel, sí. Pero cuando Seo Soojin se enojaba, temblaba la tierra.

Ambos tomaron sus mochilas y se dirigieron al auto del mayor, no sin antes saludar a sus padres.

Y a Han se le fue la cólera cuando recordó que era viernes, el partido de básquet y la existencia de Hwang Hyunjin, el chico más popular en la universidad; y el más deseado.

Lo que no sabían aquellos idiotas que babeaban por el chico de cabellos negros, era que tenía una debilidad con nombre y apellido: Han Jisung.

Además, Jisung se había encargado de hacerle saber que, no se había acercado por simplemente ser un chico tan bonito.

Hyunjin era un alma pura.

El peliazul sabía eso desde que varias veces había trabajado con Hwang, además, ambos habían asistido al mismo secundario. Lo conocía bastante bien.

Le encantaba su personalidad y otros aspectos de él.

¿Eso significaba que se había enamorado de Hyunjin?

No lo sabía.

Y, a decir verdad, tampoco quería averiguarlo.