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-¿Entonces lo perseguiste por toda la casa y lo amarraste con tus poderes para poder sacar más sangre de él?- pregunto Massimo por el teléfono mientras reía a carcajadas
-Así es- asintió Anna bajando las escaleras- Ese tonto pensó que podía escapar de mi
-¿Sabes que te escucho?- gritó Damon desde la cocina
-¡Lo se!- le respondió la chica- Bueno, cariño, deséame suerte, esta chica tendrá su primer día de clases después de... muchos años
-Suerte, Linda- dijo el chico y Anna pudo escuchar su leve risa- Te quiero
-Te quiero más- hizo el sonido de un beso antes de cortar
-Ti quieri mis- se burló Damon cuando Anna entró a la cocina- Ay, que asco me dan- hizo una mueca
-Ya te veré yo con la pelirroja humana- Anna le saco la lengua y él le respondió de la misma manera
-Bien, toma tu almuerzo, deje dinero allí también para que te compres lo que quieras, niña- le tendió una pequeña bolsa donde había preparado algo para que su amiga comiera en el colegio
-Soy... soy cientos y cientos de años mayor que tú- dijo extrañada la chica mientras tomaba la bolsita- ¿Porque haces esto? Estoy mayorsita
-No, no lo estás, pareces una niña perdida y es tu primer día, tengo que darte apoyo emocional- sonrió sinceramente- No le daría esto a Stefan, él es el amante de Bambi así que sería estupido, pero tú además de tomar mi sangre adoras la comida de... humanos- rodó los ojos
-Oh... ¿Bambi?- pregunto Anna antes de comenzar a reír y guardar la bolsa en la cartera que utilizaba como mochila
-¿Fue lo único que escuchaste?- pregunto Damon confundido y Anna asintió aún riendo
