FUERA DE REGLAS

6. Determinación

《Ardiente》 Si Mai tenía que describir lo que sentía esa palabra era lo más cercano, pero aún así no era la palabra correcta.

No supo como ni en que momento, pero sus inexpertos labios eran hábilmente tomados por los del director llevándola a la cima de un éxtasis desconocido. Cerró los ojos por la intensidad de aquel beso, que era tan agradable que parecía volar  y a la vez despertaba todas sus alarmas de peligro. Y extrañamente otros efectos habían despertado también en su cuerpo...

Aquello era un incendio, un denso fuego invadiendo su cuerpo y ella no quería quemarse...

Así que con la poca cordura que aún le quedaba empujó a Trunks lejos de ella, desde que había entrado en su despacho todo había sido una cadena de desafortunados encuentros: Primero su casi secuestró, "Del que fui salvada por él" también aquel escándalo con Launch "Del que Trunks no tenía la culpa" sus rumores por un supuesto embarazo "Que habían sido infundados por otra persona". Aún así todo tenía como causa principal el director y eso era algo que apenas podía digerir como para que ahora tenga que enfrentar esto...

El rostro de Trunks la encaraba extrañado por su reacción, como si el de verdad lo hubiera disfrutado...

Era cruel...

—¡Ya deje de jugar y burlarse de mí! —Gritó apenas dintiendo un nudo en su garganta que la privaban de hablar correctamente.

Y salió corriendo en busca de aire fresco, su interior estaba consumiendose, su pulso estaba totalmente descontrolado y su cabeza estaba en blanco. No podía pensar en nada y no quería hacerlo, era demasiado para ella, no lo aguantaba. Sin importarle que las clases ya habían comenzado, se encerró en los baños y respiro lo más que pudo, intentando controlar las lágrimas que amenazaban con salir a raudales por lo humillada que se sentía.

《¡Está loco!》 Pensaba Mai, toda la situación era absurda, carecía de lógica y ella no podía procesarlo...

—¿Hola, te encuentras bien?

Una voz dulce y preocupada hablaba con ella, pero...

《¿Quién?》

—Soy la delegada de curso, ¿Te sientes enferma? —Su preocupación era natural, ella era la encargada de los alumnos, no podía ignorar a un estudiante que tal vez estuviera enfermo. —¿Qué te parece si vamos a la enfermería? 

Mencionar ese lugar le puso la cara roja de vergüenza, casi podía sentir los labios del director sobre los suyos quemandola nuevamente. No podía...

—Estoy bien, gracias. —Ocultando su obvio malestar tras un tono natural, Mai negó la ayuda.

—No me parece que lo estés. ¿Qué te parece si sales y lo hablamos?

No iba a hablar con una desconocida, menos sobre eso... ¿Qué iba a decirle?

"Me siento algo mareada, pero es sólo porque el director Brief me beso en la enfermería justamente. ¿No es una situación muy divertida?"

Mai estaba con malestar, no iba a negarlo, pero la causa de aquello era enteramente algo que no iba a decir a nadie. Sería una locura, algo terrible, sería condenarse a las habladurías y una posible expulsión...

—No te preocupes, voy a esperarte ¿De acuerdo? —Para ser una voz dulce era sumamente insistente, Mai supo que si salía del cubículo de baño ahora o más tarde la delegada aún estaría esperando.

Decidió salir, sacudió su uniforme y masajeó su rostro antes de encarar a la delegada.

—En serio no tengo nada. —Dijo Mai al salir, frente a la puerta del cubículo una alumna de cabellos dorados la esperaba preocupada.