1. Invisible

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La idea de ser invisible varía en demasía, normalmente se denomina invisible a aquella cosa que no se puede ver a simple vista, aquello que no puedes percibir con los ojos.

Yo era invisible, y recalco la palabra: "Era" Por que tras una serie de sucesos comprometedores entre mi persona y un segundo implicado, mi anonimato e invisibilidad fueron anulados y reemplazados por una línea de escándalo y caos.

¿Puedo quejarme? No, no puedo reclamar ni maldecir mi suerte, ni mi destino en lo absoluto. Asumí que de alguna forma todo esto eventualmente saldría a la luz. Así que ahora esperando en el despacho del intendente a cargo del Instituto, sólo puedo rememorar el inicio de todo, recordando el día en que mi destino empezó a ser dibujado de otra forma hacia otra dirección.

El inicio de todo empieza en el pasado, hace aproximadamente cinco meses.

Cuando empecé a jugar con fuego...

°☆°

El sonido de la secadora irrumpió el silencio de la mañana, en el baño se encontraba una mujer adulta que usaba sólo una toalla para cubrir su delineando cuerpo curvilineo, mientras con sus manos sacudía su húmedo cabello rubio, largo y voluminoso, el inicio de un día de trabajo comenzaba para Launch. Una vez su cabello estuvo seco, procedió a vestirse con su rutinario traje formal de trabajo, falda de tubo, camisa y saco, se peino dejando su cabello suelto y se aseguró de estar maquillada sólo lo adecuado para no parecer exagerada.

Esta vez no se fijó ni en la hora, empezó a preparar el desayuno y cocino un salteado de verduras con carne asada para que su hermana menor se lo llevará de almuerzo al Instituto. No tenía prisa por realizar las tareas matutina, no correría por las calles para llegar al metro a tiempo ya que finalmente alguien vendría a recogerla. Suspiro agradecida y enamorada, Ten Shin Han era uno de los socios de la empresa donde trabajaba y hasta ahora no podía caber en la felicidad de haber tenido una cita con él.

Mientras Launch terminaba su rutina doméstica, en la otra habitación principal se encontraba su hermana menor: Mai.

Mai era una joven que todos sus vecinos llamaban "Aburrida", no ocasionaba  problemas, no era muy hablador y siempre mantenía una expresión seria, ambas hermanas eran sumamente distintas mientras Launch era agradable y sonriente, Mai era de un humor gris muy reservado, una rubia y la otra peli-negra. Se habían mudado juntas hace bastante, cuando la mayor hubo conseguido trabajo estable y bien pagado, por su parte la menor gozaba de diplomas de honor y un promedio alto para ingresar a cualquier institución y lo había logrado. Mai estudiaba en el mejor Instituto de la capital: Orange Star.

Es por eso que aun siendo joven, Mai conocia sus responsabilidades, dentro de su habitación el sonido constante del reloj la obligó a despertar, adormilada como estaba la joven luego de una noche de estudios, estiró su cuerpo para destensarlo del sueño que tenía y con su brazo extendido hacia la esita de noche para presionar el botón y silenciar ese reloj. Por su ventana se alzaba un reluciente día y una soleada mañana que marcaba el inicio de la usual rutina de Mai. Empezó con una caliente ducha muy breve y una vez aseada, en seguida comenzó a vestirse con el uniforme del Instituto Orange, una falda plisada hasta las rodillas color beige, camisa blanca y corbata.

—Aún es temprano. —Siseo para ella sola mirando el reloj de su muñeca, estab sorprendida por el poco tiempo que le tomo alistarse, mientras llevando su cabello oscuro largo hacia adelante comenzó a cepillarlo.

《Tal vez deba cortarlo》Pensó, aunque la verdad le gustaba tenerlo largo, pero era algo molestoso cuando hacia calor. Esta vez lo llevaría sujeto en una coleta.

Una vez lista salió de su pieza y se encontró con una escena muy regular, su hermana mayor preparaba el desayuno.

—Vaya, que sorpresa. —Launch estaba como siempre molestando a Mai, ambas ya listas para empezar su día.

FUERA DE REGLASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora