♡» - 11. Solo hazlo

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Jake y SungHoon se encontraban en la habitación del mayor leyendo algunos cómics que este tenía

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Jake y SungHoon se encontraban en la habitación del mayor leyendo algunos cómics que este tenía. Ya llevaban una semana fuera del internado, una semana sin preocupaciones y tareas, una semana sin inglés, era lo que pensaba SungHoon.

── Hoonie ── el pelinegro dejo de hojear las páginas del libro y miró a Jake, el cuál estaba recostado en la cama.

── ¿Qué pasa hyung? ¿necesita algo? ¿se siente mal? ── preguntó SungHoon haciendo soltar una risa por parte del castaño.

── No Hoonie, estoy bien ── el coreano asintió y hizo un ademán, indicando que el mayor continuará ──. ¿Practicas algún deporte?

La pregunta descolocó a SungHoon , ¿nunca le había dicho que patinaba en hielo? ¿enserio el mayor no sabía que era un patinador reconocido en Corea? Al parecer, Jake no sabía absolutamente nada de eso.

── ¿A qué va la pregunta, Jakey? ── el coreano se recostó en la cama quedando frente a la cara del australiano.

── Supongo que debes tener alguna pasión, cómo un deporte, no lo sé ── encogió los hombros mientras dibujaba círculos en la cama.

── Ya veo ── replicó ──, desde pequeño practicó el patinaje sobre hielo, exactamente desde los ocho años hasta el 2019 ── el castaño abrió los ojos de par en par y Park rió por su reacción.

── Wo-ah ── masculló Jake con asombro.

── ¿Y usted hyung? ── cuestinó el menor y Jake suspiró mirando el techo.

── Yo practicaba fútbol desde los tres años, era muy feliz cuándo corría para alcanzar el balón ── sonrió recordando esos momentos ──. Recuerdo la primera medalla que gané en una liga, estaba muy feliz ese día, no lo podía creer, ese día mi madre me compró un regalo por mi esfuerzo ── sonrió con nostalgia ──. Era muy feliz Hoonie.

Jake volteó a mirar al coreano con pequeñas lágrimas de nostalgia amenazando por salir, el azabache rodeó al mayor entre sus brazos dejando que este se desahogue sin ser juzgado. Pequeños sollozos salían de los labios del chico de piel acanelada mientras que el de tez pálida lo abrazaba cálidamente acariciando su rostro para calmarlo.

Ambos agradecidos de que la señora Shim haya salido de compras y ambos estén solos.

Los sollozos del australiano se empezaron a apagar dando a entender que ya estaba más calmado. SungHoon tomó el mentón de Jake conectando miradas con los ojos del chico.

A los ojos del patinador, Jake se veía demasiado lindo, sus ojitos hinchados y nariz rojita cómo una cereza, una hermosa vista de su mayor. Al igual que la vez pasada ambos se volvieron a perder en los ojos del contrario, ambos completamente hipnotizados en los profundos abismos de el otro.

Sin darse cuenta ambos tenían sus rostros a escasos centímetros, tanto así que sus respiraciones se mezclaban convirtiéndose en una sola.

¿Qué era aquello que estaban sintiendo?

SungHoon bajó inconscientemente su vista a los labios de Jake, se veían tan esponjosos, suaves, tan... apetecibles.

''Solo... hazlo SungHoon'' se dijo así mismo reuniendo la mayor confianza y seguridad para hacer lo que tenía pensado en mente.

── Lamento lo que voy a hacer ahora Jakey ── susurró por la corta distancia que había entre sus labios.

── ¿Hacer qué, Sunghoon-ah? ── preguntó confuso.

── Esto ── replicó acercándose al rostro del australiano.

Finalizó el menor posando sus labios sobre los de Shim, los movió suavemente y sin ser brusco con el mayor. Jake no correspondía, no sabía que hacer, solo estaba estático sin mover un músculo.

── Honnie, yo no sé que hacer ── respondió alejándose, avergonzado por lo dicho.

── Solo relájate y déjate llevar ── musitó rozando sus labios atrevidamente con los del castaño.

Volvieron a unir sus labios, está vez siendo correspondido por ambos. SungHoon guiaba los labios de Jake, los cuales se movían con torpeza y algo de brusquedad lo que hacía que se contrastará con lo delicado y suave que era SungHoon con él.

Jake posó sus manos en el cuello de SungHoon mientras que el coreano las tenía en su cintura y lo apegaba cada vez más a su cuerpo.

La casa estaba en completo silencio, por eso solo se escuchaba el sonido que provocaban sus labios al moverse. La falta de aire se hizo presente en sus cuerpos y se separaron para respirar pero no tardaron en volver a unirlos, esta vez siendo más atrevidos.

La lengua de SungHoon delineó los belfos de Jake pidiendo permiso para entrar a su cavidad bucal y gustosamente el extranjero lo dejo entrar, sus lenguas se tocaron entre sí empezando a danzar dentro de sus bocas, haciendo que una peculiar corriente eléctrica recorriera sus cuerpos.

── Me gustas Jakey ── susurró SungHoon juntando las frentes de ambos mientras mantenían los ojos cerrados.

── También me gustas SungHoonie ── correspondió a su confesión acurrucándose en el pecho del más alto.

── También me gustas SungHoonie ── correspondió a su confesión acurrucándose en el pecho del más alto

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