Nunca te alejes de mí (Tapión y Tú)

Capítulo final

Salimos del portal el cual nos transportó a un mundo no muy distinto al nuestro, se veía un poco más carente en cuanto a tecnología, pero fuera de eso no noté nada más que fuese diferente, aunque tampoco es como si tuviese mucho tiempo para revisar ese tipo de cosas, a penas salimos del enorme bucle dimensional nos dedicamos a buscar con desesperación el Ki de (Tn). El portal se había abierto sobre una zona montañosa, no había nadie en varios kilómetros a la redonda, pasaríamos desapercibidos al menos, pero nos costaría más trabajo encontrar a (Tn), por más que me concentraba no lograba percibir su ki y al parecer Gohan tampoco podía sentirlo, comenzamos a movernos por el aire alejándonos de nuestro punto de partida y aún nada, no fue sino hasta que divisamos una vivienda bastante grande y lujosa que pudimos ver a los padres de la joven subiendo a una especie de vehículo rojo para salir con rumbo a la ciudad que se encontraba al pie de las montañas.

-Si esos bastardos salieron de ahí (Tn) tiene que estar cerca. - Dije serio.

-Si pero mira ese lugar; es enorme, nunca vamos a encontrarla a tiempo, debemos sacarla antes de que portal se cierre. - Agregó mi acompañante.

-Lo sé... ¡Mira eso! Hay gente ahí, probablemente la servidumbre, podríamos pedirles ayuda.

-¿Y si se asustan y se rehúsan a ayudarnos?

-Pues los amenazamos y ya pero hay que actuar rápido, tengo un mal presentimiento.

Ambos fuimos corriendo hasta la puerta de la enorme propiedad, las personas al vernos se atemorizaron, en especial al verme, supongo que es la primera vez que ven a alguien con mi apariencia, por lo que Gohan se encargó de tranquilizarlos y de explicarles el motivo de nuestra presencia ahí, la servidumbre se mostró algo dudosa ya que cualquiera podía llegar y decir lo mismo para tener una excusa para robar en la casa pero entonces recordé que llevaba conmigo una fotografía en la que aparecíamos (Tn), Minoshia y yo juntos, la tomamos el día que fuimos a la isla de la señora Bulma, me acerqué para mostrar la fotografía haciendo que todos retrocedieran tomando una distancia prudente de mí.

-Por favor, se los ruego. - Dije. - Ella... (Tn)... lo es todo para mí y está embarazada. - Todos comenzaron a intercambiar miradas al escuchar eso. - No sé si estén al tanto, pero sus padres son unas personas horribles con ella, mi hijo y la mujer que amo corren peligro, así que se los pido... si saben dónde está díganmelo, por favor.

Hubo un momento de silencio que para mí fue como una agonizante eternidad, toda esta frustración y miedo de que algo terrible le estuviese pasando a (Tn) ahora mismo se sentía como mil agujas al rojo vivo golpeando mi pecho. En ese momento, de la puesta principal de la casa salió una mujer de mediana edad, mirada melancólica, piel morena y cortos cabellos negros, nos miró fijamente un segundo, suspiró y dijo:

-Vengan conmigo... estará mejor en cualquier otro lugar que no sea aquí.

La mujer comenzó a caminar hacia el interior de la casa, sin dudar ni un segundo Gohan y yo la seguimos con pasos presurosos hasta lograr alcanzarla, mientras caminábamos a su lado traté de entablar conversación; la interrogué acerca de qué había pasado cuando los tres humanos regresaron a este lugar, cuándo fue la última vez que vio a (Tn), si ella estaba bien, pero la mujer simplemente se limitaba a caminar sin dirigir la mirada a ninguno de los dos, ni siquiera nos permitía ver con claridad el semblante en su rostro. Cuando regresé mi atención hacia los pasillos que estábamos recorriendo me percaté de algo que solo incrementó aún más mi preocupación; la mujer nos estaba guiando hacia lo que parecía ser un sótano o alguna especie de pasadizos que se localizaban debajo de la propiedad, bajamos por unas escaleras de concreto y caminamos por un pasillo totalmente blanco, era como caminar por los pasillos de un hospital... o de un laboratorio. La morena finalmente detuvo su andar justo frente a una puerta pequeña de color gris, la mujer sacó una tarjeta azul de su bolsillo y la deslizó por un dispositivo que se hallaba al lado de la puerta, misma que al instante se abrió permitiéndonos contemplar la macabra escena: