|056|

462 36 25
                                    

Jace

Habían pasado casi 6 días desde que Cassie abandono Nueva York para abordar un avión con destino a Fort See. Obviamente nosotros también queríamos ir, pero Kye no nos dejo, argumentando que Cassie era una de las suyas y que tanto ella como Allex podrían manejar perfectamente esta misión.

Su trabajo en Fort see era sencillo, debían ir a investigar a Kratom y convencerlo de que viajará a Nueva York para hacer un negocio con los Serpents, conociendo a Kratom era casi imposible que se negara, pero dentro del plan había algo que no me gustaba. Aston también sería parte. Yo lo conocía y sabía que el hombre no era tonto. Él es aliado de los black's desde que lo "sacaron" de su antigua banda, así que comenzó a formar la suya. No le iba mal, vendía harto pero no tanto como nosotros. Kratom le hacía rebajas ya que era un buen cliente. Pero, por un lado, Kratom haría cualquier cosa por dinero, en cambio Aston se lo pensaría dos veces.

—¿Todo bien?

—Si, Christian.

—¿En que piensas?

—En nada.

—No te creo —se levantó del piso. Llevábamos más de una hora de entrenamiento intensivo.

Kye nos estaba mandando a muchas misiones, la mayoría eran entregas dentro del sector, pero con la diferencia que algunas eran millones y otras solo unos miles de dólares. Kye vendía harto y me daba la impresión que todo Nueva York era cliente de los serpents.

—Estoy cansado —comenté.

—Cambiaste el tema, pero yo también lo estoy.

Salimos de la habitación de entrenamiento y subimos las escaleras hasta llegar a nuestra habitación. Estaba todo desordenado. Ambos comenzamos a ordenar, Christian se dedicó a barrer mientras yo hacía mi cama y luego limpié el baño. Nos demoramos unos 45 minutos en ordenar y limpiar nuestra habitación.

La puerta se abrió y segundos después entraron los gemelos.

—Estoy aburrido —llegaron a nuestro lado.

—¿Donde estaban? —preguntó Christian.

Kye nos citó a una reunión —contesto Harry.

—¿Que quería? —fruncí el ceño.

—Quiere separarnos —abrí mis ojos sorprendido.

—¿Cómo? ¿Por qué?

Kye dice que debemos comenzar a trabajar en equipo y no solo con nuestro grupo.

—Los serpents trabajan todos juntos —comentó Tom.

—¿Ya y? —Los miré frunciendo el ceño.

—Simplemente quiere que comencemos a trabajar con sus hombres, ya que pronto seremos parte oficial de los serpents —respondió Harry, encogiéndose de hombros.

—Hoy tendremos nuestra primera misión sin ustedes —mire a los gemelos.

—¿Tienen una misión? —ambos asintieron con la cabeza.

| Dulce venganza | #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora