Capítulo 29

1.4K 134 25
                                    

Deku volvió a mirarlos para ver qué es lo que hacían y se sorprendió al ver como Momo tomaba del hombro a su amigo e iba acercándose cada vez más. El peliverde no apartó la mirada para observar lo que Todoroki haría pero desprevenidamente su celular comenzó a timbrar, logrando captar la atención de ambos jóvenes...

«Demonios» susurró Midoriya al ver la pantalla de su celular mostrando el nombre de su amiga; mientras una gota de sudor escurría por su rostro debido al nerviosismo de ser descubierto, alcanzó a colgar la llamada con la mano temblorosa, pero justo en el momento en el que pensó que sería atrapado, un gato saltó del tronco de uno de los árboles más cercanos y cayó justo en los brazos de Todoroki, robando totalmente su atención del bulto de hojas en el que se encontraba Midoriya escondido. Momo por supuesto que también le prestó toda la atención pero no necesariamente para acariciar al adorable gatito que ahora reposaba tranquilamente en los brazos de Todoroki sino para voltear a ver enojada al pequeño animalito porque gracias a su repentina aparición no había podido acercarse más al pelimitad blanco, como tanto deseaba desesperadamente.

Midoriya al ver que ambos compañeros ya estaban sumamente distraídos, aprovechó el momento para  escabullirse de ahí lo más rápido y silencioso posible.

Nuevamente utilizó su quirk para alejarse corriendo lo que más pudiera del parque... 
Con la respiración agitada se recargó en las paredes de un edificio mientras llevaba su mano al pecho para sentir los rápidos latidos de su corazón, tomó grandes bocanadas de aire y cuando por fin pudo relajarse y recobrar el aliento, le regresó la llamada a _______.

_______ le había devuelto su primer llamada porque le pareció extraño todo lo que él preguntó sobre Todoroki lo que la llevó a pensar lo peor, creyendo que algo le había sucedido y que él se lo estaba ocultando.

Deku tuvo que fingir que no sucedía nada, le mintió diciéndole que solo quería informarle algunas cosas sobre la escuela.

Una vez que cortó la llamada, soltó una bocanada de aire, ¿qué pasaba entre Todoroki y Momo? ¿sería posible que su gran amigo le mintiera a su querida amiga? ¿o tan sólo estaba malinterpretando todas las cosas? si tan sólo su celular no hubiera sonado, podría haber descubierto lo que en verdad sucedía... pero lo que era más que obvio es que ______ no tenía conocimiento sobre ese encuentro y lo peor de todo eso es que había visto como su compañera se le acercaba descaradamente al heterocromático y que este ni siquiera hizo algo al respecto para evitarla o quitarla, a decir verdad, Todoroki no parecía ese tipo de chicos que iban e ilusionaban mujeres, de hecho siempre fue popular entre las chicas pero nunca mostró interés en alguna, incluso a Momo jamás se lo mostró, sí, los veían juntos muy a menudo pero Todoroki siempre estuvo al margen mostrando aquel lado solitario pero ahora que se encontraba en una relación con ________ , no dejaba en claro aquella amistad que se podía malinterpretar.

Solo esperaba que fuera un malentendido... o




tal vez no...

.

.

«¿pero qué rayos pensaba?»

-


Todoroki dejó de acariciar el gatito que había caído en sus brazos para dejarlo ir, pues este comenzaba a incomodarse. En todos esos segundos en los que él tocó al gato, una leve sonrisa se mostró en su rostro pero en cuanto el animalito saltó de sus brazos para irse corriendo, este esfumó aquella sonrisa para voltear a ver fríamente a su amiga provocando que esta retrocediera de miedo.

— Momo—la llamó sin quitar su fría expresión.

— ¿Si?—le respondió con voz temblorosa.

— Quiero que sea la única vez que te lo tenga que decir, como sabemos eres una chica lista por lo que no tendré que volver a repetirlo—la miró fijamente sin ningún brillo en sus ojos— deja de buscarme y de tratar pasar tiempo conmigo. En el momento en el que le pusiste un dedo encima a Okamoto, dejaste de existir para mí—le dijo cruelmente sin una pizca de remordimiento. Jamás me voy a fijar en ti, con quien quiero estar es con Okamoto, es la chica a la que quiero.

Y justo cuando dijo querer a Okamoto, por una milésima de segundos apareció un brillo en sus ojos, eso es lo que únicamente ______ Okamoto provocaba en él.

Amor y esperanza.

No quiero tener problemas con Okamoto por tu culpa, de que empiece a mal entenderme sino me alejo, y a pesar de saber que tengo novia seguiste acercándote a mí, ¿crees que no me dí cuenta de lo que planeabas hacer? incluso si algún día Okamoto y yo terminaramos, no me cruzaría por la cabeza salir contigo, detesto a las personas que juegan sucio y que se meten en lo ajeno; sino quieres ganarte mi odio, entonces deja de esforzarte conmigo porque no lo vas a conseguir y sobre todo no me metas en tus tontos juegos infantiles.—terminó por decirle a Momo y se marchó de ahí a pesar de que la vio derramar unas cuantas lágrimas.

Podrían creer que fue demasiado duro, pero él solo dijo lo que sentía, a él no le correspondía estar ahí con ella, su lugar estaba al lado de Okamoto y de nadie más.

-

En tanto a Midoriya para continuar el resto de camino que faltaba para llegar a su casa, fue a paso lento esa vez, pues se encontraba desanimado al no saber qué hacer por lo que acababa de ver. Iba pateando una piedrecilla en todo su recorrido para distraerse pero le costaba mucho esfumar aquellos pensamientos.

Después de varios minutos se fue adentrando a su característico barrio, donde los niños jugaban en el parque de la entrada y donde él siempre andaba con ______ cuando ella lo visitaba. Sintió un poco de nostalgia al ver a los niños divertirse sin tener preocupación alguna más que la escuela, los observaba por su costado derecho y al ir volteando terminó chocando con alguien, cuando apenas iba a disculparse, levantó el rostro y quedó congelado al ver a Todoroki Shoto frente a él, con su típica expresión de seriedad, pero podía ver un poco de enojo en sus ojos, eso fue lo que le causó miedo—tembloroso lo saludó con un «hey» pero Todoroki no le respondió.

— ¿Qué te trae por aquí Todoroki?—volvió a hablar Midoriya, evidentemente muy nervioso.

— Midoriya...—hizo una pausa el pelimitad blanco, dejando en intriga al pecoso para finalmente decirle... —sé que estabas ahí...

Y entonces el peliverde palideció. 

Salvación (Todoroki y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora