B.N.H.A: El Héroe sin Quirk

Capítulo 6

Piernas. Tronco. Brazos. El Taekwondo como todas las artes marciales tenía que basarse en el movimiento del cuerpo del practicante, obligando al mismo a mejorar una para hacer uso de toda la fuerza del arte marcial. El Taekwondo se centraba en la fuerza de las patadas, de los movimientos veloces y agiles del usuario en contra de su enemigo, obligando al mismo a moverse con flexibilidad, haciendo que el practicante fuera más ágil y veloz. Centrado en las piernas, el taekwondo se centraba sobre todo en la flexibilidad y fuerza de las piernas, así como los brazos para obtener un balance perfecto a la hora de usar una patada. Taejin lo había comprobado cuando usó su nuevo estilo, el taekwondo renovado de Corea del Sur, al enfrentar a un enemigo atando un brazo en su espalda. Los golpes que debieron acertar y ser demoledores, no lo fueron en ningún momento y tuvo que evolucionar su arte marcial. Gracias a su experiencia con el taekwondo de Corea del Norte, él había mejorado el arte marcial hasta crear lo que ahora la gente llamaba como Renovación de Taekwondo o Re-Taekwondo, un arte marcial centrado en las patadas frontales y poderosas, en el movimiento de los pies y en la torsión de cadera y torso del aprendiz y el maestro.

Durante años, Jin Taejin había buscado a alguien a quien enseñarle su preciado arte marcial. Enfrentó a chicos inteligentes, fuertes y precavidos. De todo estilo. Pero cada uno de ellos había dejado en claro que prefería la utilización de los quirk's como medida defensiva, a lo que él vio un fallo demasiado grande. ¡Los héroes dependían de sus poderes! Con los años, Taejin había caído en una ligera desesperación mezclada con depresión, viendo un mundo lleno de usuarios de particularidades, de gente con trajes estrafalarios que habían olvidado el esfuerzo humano. No estaba en contra de los quirk's ni de una sociedad basada en los héroes como estilo de vida. Pero cuando el creó el Re-Taekwondo lo hizo para proteger a su país, para salvar a su gente. Y ahora todo su esfuerzo parecía haber terminado por completo, desperdiciado y desechado por una sociedad que admiraba a los héroes, que veía el uso de los kosei como algo esencial para sobrevivir en cualquier situación.

Estaban demasiado equivocados. Si bien los quirk's eran necesarios para lidiar con los villanos, no todos eran fuertes o aptos para un enfrentamiento cuerpo a cuerpo. Aun así, la decadencia de las artes marciales había comenzado en la edad de plata de los héroes y ahora estaba dando con fuerza en la sociedad.

Pero ese chico.

Desde que Taejin conoció a Midoriya Izuku, lo había entrenado durante cuatro meses sin un día de descanso, con la autorización de su madre y la de Ikuda Tsuo quien les había cedido las instalaciones para el entrenamiento. Había puesto al joven a prueba, obligándolo a aceptar el hecho de que no tenía ni tendría un quirk pero que podría hacer algo por el mundo. ¡No se necesitan poderes para ser héroes! O eso era lo que él realmente pensaba, un hombre criado en una edad donde los poderes no estaban tan a la orden del día. Ver un quirk era extraño en aquellos tiempos y el setenta por ciento de la población era quirkless. Todos aun dependían de los soldados, de gente que supiera pelear los enfrentamientos que ellos no querían.

Y todo eso había cambiado en unas décadas, relegando a todo aquello ajeno a los quirk a un olvido cercano. Por orgullo y ego, Taejin no quería dejar el arte que él había perfeccionado en el olvido. ¡Quería un sucesor para su arte! Y había encontrado a un chico con la voluntad de ser un héroe, con la pasión para llevar el Re-Taekwondo a un nuevo nivel. Solo necesitaba alguien que creyera en él, que lo empujara.

Solo un vistazo. Con una ojeada, vi lo que ese chico necesitaba. ¡Y nadie lo notó!

Midoriya Izuku. Infravalorado. Empujado a creer que sin un quirk él no podría hacer nada. ¡Sin particularidad no había héroes! Y era una patética idea que la sociedad había implantado en los jóvenes con todo el marketing de los héroes y quirk. No había necesidad de las particularidades para ser un héroe. Policía. Bombero. Militar. Doctor. ¡Cientos de oficios que salvaban más vidas que los héroes! Un héroe de fuego no podría salvar a una mujer con un corte profundo. O tenías un quirk de curación o no podrías hacer nada. En cambio, un médico podría hacer lo necesario, sin un quirk de curación.