Deja de apuntarme con la pistola... Sabes que no quieres hacerlo.- Intenté calmarlo- Tú no me matarías, cariño.
-¡No me llames así! - me gritó apuntándome esta vez a la cabeza- Te volaré los sesos para que comprendas que engañarme jamás fue una opción.
-Yo no te engañé.- Si lo había hecho.- Las fotos fueron editadas, yo jamás te haría eso.
En realidad sí. Lo odio. Lo detesto. Se merece una y mil infidelidades de mi parte.
Yo la quería a ella. A Marta. Ella sí me cuidaba, ella no me golpeaba como lo hacía él. Era como el romance prohibido que nunca tendría un final feliz.
-Si me matas, Juan, irás a la cárcel. -Le susurré.
Sabía como calmar su ira. Amaba mi voz. Amaba mis susurros. Mis dulces pero falsas palabras. Pero él no me amaba ni yo a él.
-Tienes razón...- Dejó de apuntarme para apuntar a mi chihuahua.
No.
-¡Eh! Ni se te ocurra.- Quise reaccionar pero todo fue muy rápido y yo muy lenta.
Disparó.
Mi perro murió.
Y yo lloré.
Y él se "arrepintió" al ver mis lágrimas caer. Estaba enfermo. Lo detestaba.
-Mierda... La policía.- Me miró con enfado.- ¡Cierra las putas cortinas de la ventana! ¿O es que tengo que decírtelo todo, puta inútil?
Antes de cerrarlas el policía me vió.
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Terceiro escrito: palabras forzadas
Ficción GeneralNeste caso a misión consistiu en escribir un texto narrativo incluíndo unha serie de palabras na nosa narración, para o cal se debía escoller un dos seguintes grupos. Opción 1: cereixas, fantasía, respiración, gorila. Opción 2: romance, xanela, pist...