ᴏɴᴇ ᴘɪᴇᴄᴇ ᴏɴᴇ ꜱʜᴏᴛꜱ

Toxico (Cracker)

N/A: Hay muchos pedidos lo sé, ahorita mismo estoy haciendo lo posible para contarlos y sacarlos.

Advertencia: Todo tóxico nada bonito adelante.

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Sentada en una esquina del cuarto que se volvió tu única realidad, tu único mundo, ignoras el sonido de la puerta abriéndose.

"Mujer, creí haber dado instrucciones para cuando este de regreso" su tono siendo acompañado con algo de irritación.

"____, que intentas hacer esta vez?" El observa tu forma inmóvil en aquella esquina del cuarto en el que estás confinado.

Tu plan, ignorarlo, sabes lo volátil y sádico que puede llegar a ser, y lo fácil que se aburre con las cosas, talvez... si eres aburrida pierde el interés en ti.

Oh pero que ingenua.

El ve tu silencio como un reto, una revolución, una actitud desagradecida.

Le molesta.

"_____" puedes escuchar desde el otro lado de la ornamentada habitación ese venenoso tono con el que pronuncia tu nombre...

Afortunadamente aun no lo has visto enojado, todas las pruebas de amor, como él los llama, ha sido meramente su sadismo en el más puro de los momentos.

Pero ahora.

Escuchas sus pasos, pasa a un lado del armario, el tocador la mesa, sabes exactamente a cuantos metros de distancia esta, conoces este cuarto como la palma.

Y la distancia es horridamente corta.

Puedes sentir esa aura, si antes no le tenías miedo, ahora estás aterrorizada de su simple presencia.

Quieres voltear a verlo, al menos para intentar apaciguar su ira, fingiendo que tu recién mal comportamiento era temporal, algo tonto que quieras hacer.

Pero el temor te tiene paralizada.

Su mano tomando con fuerza tu muñeca, como si en cualquier momento fuera a romperte esta, el dolor haciendo que tus palabras llegaran a tu boca.

"Cracker lo siento, lo siento, no lo volveré hacer" comienzas a sentir las lagrimas desbordando tu ojos.

Demasiado tarde, él esta frustrado cada que no recibe la atención y alabanzas debidas.

"Solo tienes que hacer una cosa y ni eres capaz de hacerlo, si que eres tonta mujer..." con mucha facilidad te tira a la cama, si no fuera por la cantidad de almohadas y el colchón hubiera sido más doloroso.

"...pero esta bien, llorar, implorar..." puedes ver como se acerca, retirándose la ropa a la vez. "... eso igual te queda bien" termina de decir para tomar tu barbilla, esos brillantes orbes color lila que enseñan sin preocupación la clase de sentimientos que tiene por ti.

Llevando con fuerza tu cabeza contra la superficie acolchada, sientes como levanta tu parte trasera, tus rodillas siendo lo único que eleva tu cuerpo, su otra mano agarrando con fuerza tu cadera, sus uñas enterradas sobre la suave superficie de tu piel.

El dolor su agarre te hace saber que dejará marca, pero no es nada nuevo.

No preparación, no nada, el dolor recorre tu espina el momento en el que este se introduce, tus quejas de dolor siendo retenidas por las almohadas que cada vez se llenaban de tus lagrimas, tu cuerpo ya debería estar acostumbrado a su tamaño y ferocidad, pero en este momento, donde su enojo saca lo mejor de él, hace que los encuentros anteriores se vea como un juego.

Y sabías que esto era por tu culpa y por que realmente lo quieres, no puedes vivir por ti misma, lo necesitas, talvez no lo entiendes por que eres algo tonta, pero él si reconoce lo inútil que puedes ser estando sola.

Aparte, de que te quejas, es uno de los comandantes dulces, osea de los más fuertes de entre su familia, deberías estar agradecida  de que él tenga al menos una pizca de afecto por ti.

Y estas agradecida, de que haga todo eso por ti.

Podías sentir como este continua abusando de tu cuerpo, y depues de varios minutos y varias cargas termina acostándose a un lado de tu maltratado cuerpo, tomándote entre sus brazos con delicadeza y besnadote la sien con ternura.

"No vuelvas a ignorarme así galletita" podías escucharlo aún con tu conciencia medio ida por todo el dolor previo. Y aceptando su muestra de afecto te acercas más a el deseado sentir su temperatura.

"No lo volveré hacer" le respondes, un extraño sentimiento de seguridad haciendo que termines dormida junto a el. Como todas las noches previas.