Capítulo 48

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Con un movimiento rápido cerro la puerta, ella lo había visto, habían sido segundos pero estaba completamente seguro de que lo había hecho, Gun empezaba a sudar frío, sus pensamientos no estaba en sincronía y su cabeza estaba punto de estallar, no podía pensar con claridad que era lo que tenia que hacer ahora, fugaces y estúpidas ideas cruzaba su cabeza sin parar pero estaba seguro que ninguna traería nada bueno. Minutos después aun de pie en medio de la habitación con la mente hecha un lío respiro profundamente hasta que el latido de su corazón se tranquilizo, obligo a sus pies a moverse en busca de su celular, con movimientos torpes y desordenados dio con el en medio del escritorio, en un intento por marcar el número de Off el teléfono resbalo de sus manos haciendo que cayera al suelo. No había tiempo para sentir miedo, necesitaba calmar sus nervios antes de que las cosas se salieran de control, tomo nuevamente pequeñas cantidades de aire, inhalando y exhalando lentamente, pensó en lo mucho que le había costado llegar a sentirse bien consigo mismo, el largo camino que el destino le había tenido preparado y lo mucho que lucho contra los fantasmas del pasado, ahora él estaba mejorando cada día y no podía dejar que todo aquello por lo que tanto había luchado se fuera por la borda como si nada. Además estaba Off, la persona que sin lugar a dudas estaría a su lado pasara lo que pasara, el hombre al que le había entregado su corazón, Gun sabía que Off no lo defraudaría, también tenía a Chimon que aunque él ignoraba los hechos de su pasado le gustaba pensar que también estaría a su lado apoyándolo.

Nuevamente tomó su celular entre las manos y marco el número de Off, espero tras la linea por unos segundos con el constante tono que anunciaba una llamada saliente, espero hasta que fue enviado al buzón de voz. Empezaba a creer que él no contestaría después de la tercera llamada sin éxito, pero aun así lo intento una vez más, los nervios lo estaban consumiendo mientras esperaba, miro la puerta de la habitación imaginando que Mild entraba y lo forzaba a salir mientras le gritaba lo mucho que estaba decepcionada de él. Gun sacudió la cabeza ante esos pensamientos, su mente no hacía mas que torturarlo y él necesitaba hacer algo ahora, dio un paso y enseguida otro, sus pies caminaron lentamente como si el peso de la desdicha y la infelicidad de tantos años estuviera sobre sus hombros y pesaba tanto que dolía, quizás lo mejor sería salir y acabar con todo de una vez, Gun enfrentaría a su madre, le diría todo lo que su corazón lastimado sentía hacia ella, lo mucho que deseaba no verla nunca más, lo afortunado que hubiera sido si ella mejor lo hubiera abandonado hace años y por ultimo y aunque estaba seguro de que ella lo tomaría como una ofensa le diría que a pesar de todo el buscaría la manera de perdonarla, no por ella, no por nadie, Gun lo haría para por fin poder vivir en paz consigo mismo, sin tener ni una pizca de rencor ni odio en su corazón hacia nadie.

-Gun bebé, escúchame- Gun empezaba a creer que escuchaba voces en su cabeza después de tanto pensar -¿Gun, confías en mi verdad?- aquellas palabras sacudieron su corazón regresándolo a realidad, él aun tenía el celular en su oído y Off finalmente había contestado, se detuvo antes de abrir la puerta.

-Si, confió en ti- respondió casi en un susurro.

-Bien, escucha lo que diré, pase lo que pase y escuches lo que escuches, no salgas de la habitación ¿Lo harás?- Gun no estaba seguro de poder cumplir pero aun así acepto.

-Si- respondió, quiso decir algo más pero Off había colgado, rápidamente se paro al lado de la puerta y agudizo sus oídos para intentar escuchar, sea lo que sea que Off pensaba hacer sabía que desataría una catástrofe.

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-Eso es todo bebé, tú solamente confía en mi, arreglare todo para ti- susurro Off para si mismo.

Esta mañana cuando despertó nunca se le paso por la cabeza pensar que su padre y Mild estaban en el país, Off casi había olvidado como respirar cuando tocaron la puerta y tras ella se encontraban los dos, después de un incómodo saludo con los dos mayores Mild había preguntado por Pim y Off no tuvo más remedio que mentir, diciendo que había salido a tempranas horas de la mañana para hacer un trabajo universitario, Off no era tonto y sabía que ella estaba dudando, aun así mantendría la mentira hasta la muerte. Antes de que ella pudiera hablar con Gun y saber que él había cambiado su estilo de vida Off necesitaba contarle todo a su padre, estaba consciente de que eso mataría su corazón pero tenía la esperanza que con el tiempo y su ayuda el se recuperaría. 

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