Capítulo 49

807 139 25
                                    

Off aferro a Gun a su pecho, ignoro la mirada desconcertada de su padre junto con el llanto sin sentido de Mild, sintió como las manos de Gun clavaban fuerte a sus costados, eso sin duda dejaría marcas pero Gun ahora no estaba pensando en sus acciones, seguramente estaba atemorizado, Off podía sentir como su cuerpo temblaba ligeramente contra el suyo y lo único que deseaba era guardarlo entre sus brazos para siempre, protegerlo de las personas que se supone deberían haber sido su mayor bendición y fortaleza, de esos que ahora mismo se encontraban aquí y los que no tenían derecho de exigir nada, Off los mataría si se atrevían a siquiera mirar a los ojos a Gun.

Sintió nuevamente los temblorosos dedos de Gun clavar en su cintura, no tenía idea que era lo que cruzaba por la mente de su chico pero esperaba que él tuviera la fuerza suficiente para enfrentar lo que pronto se convertiría en uno de los días que marcarían un antes y después en su vida.

-Todo estará bien, bebé- susurro, esperaba que sus palabras aliviaran un poco el temor que estaba sintiendo, Gun asintió con la cabeza entre lentas respiraciones -eso es, eres la persona más valiente que conozco, vamos a enfrentar esto juntos-

-¿Qué hacen ellos aquí?- pregunto en un susurro refiriéndose a Tay y Sunan -no quiero verlos, diles que se vayan- el tono de voz de Gun rompió su corazón, en otras circunstancias el habría cumplido sus deseos pero esta no era la situación y Off necesitaba que los dos hombres estuvieran presentes al menos hasta que la verdad saliera a la luz, después Gun decidirías si quería tener un nuevo encuentro con ellos.

-Lamento mucho que todo haya resultado de esta manera- Off beso su frente -vamos a hacerlo juntos, no soltare tu mano y cuando todo esto termine vamos a reconstruir tu corazón, lo haremos juntos paso a paso y será tan despacio que ni siquiera dolerá. Te amo y daría mi vida por verte feliz-

-¿Lo prometes?-

-Lo prometo- confirmo Off.

Las palabras de Off rápidamente causaron efecto en Gun, él sabía que Off estaría a su lado, solo necesitaba escuchar aquellas palabras en voz alta para encontrar el valor que necesitaba para enfrentar a Mild, esta vez no había espacio para el miedo mucho menos para la duda y Gun reuniría todos aquellos malos momentos del pasado y los convertiría en su fortaleza, llegarían tan alto que nadie nunca más se atrevería a siquiera pensar en tocarle un dedo para hacerle daño.

-¿Off que sucede?- pregunto Mike angustiado mientras intentaba tranquilizar a su esposa, miro desconcertado la escena frente a sus ojos, no recordaba en su vida haber visto al chico que abrazaba Off con tanta vehemencia, en su pecho una fuerte incertidumbre crecía cuando los segundos pasaban y nadie había dicho nada.

-Ellos solo quieren hacernos daño cariño, no los escuches... vámonos por favor, llévame lejos de aquí- dijo Mild entre lágrimas desconsoladas, Mike se quedo perplejo ante aquellas palabras. Off su hijo, al que había visto crecer, al que sin lugar a dudas le enseño a sentir empatía por las personas, al que le repitió cientos de veces que nunca tenía que hacer daño a nadie, ese mismo chico que tenía un gran corazón. No, él no podía hacer daño a nadie, mucho menos a su esposa, Mild simplemente tenía que estar equivocada.

-No la escuches papá, esa mujer sin corazón esta mintiendo, esta completamente desquiciada-

-¡Off no te permito que hables así de ella, discúlpate ahora!- Grito Mike sorprendiéndose así mismo, él nunca había puesto a nadie antes que a su hijo, una punzada dolorosa atravesó su corazón y la imagen viva de su ex esposa cruzo su mente reprochándole la manera en que acababa de tratar a su hijo.

-Papá, siento tanto haber callado esto, pensé que estaba haciendo bien en ocultarlo por que creí que serías infeliz si lo decía, pero ella no es la mujer que crees, ella no es un ser humano, ni siquiera estoy seguro de que tenga un corazón...-

-¡Cállate!- grito Mild entre llantos, su mirada llena de odio y algo muy parecido al resentimiento cayo sobre Gun como si el tuviera la culpa de todo, Gun no la miraba pero podía sentir su penetrante mirada atravesando hasta su alma, dejándolo completamente vulnerable, Gun no quería sentirse así, nunca más iba a dejar que ella se apodere de su vida y controle sus emociones a su antojo. El ahora no estaba solo.

SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora