Baby ©

十九. Capítulo Diecinueve

La pequeña Lisa de ahora 14 años recostó su cabeza contra la superficie dura de su mesa.

El día de San Valentín era un desperdicio según ella.

Aunque muchos decían que era afortunada, ya que recibía muchos regalos y demás, ella prefería esta en clases que perderse en esas cosas.

Como de costumbre llegó una molesta omega que se sentaba al lado ella desde hacía años, pero seguía sin agradarle, primero le hacía preguntas raras, y también decía muchas tonterías.

— Seguro vas a querer conservar tu pureza con un alfa de tu tipo —la escucho decir, al verla de reojo encontró una mueca de asco en su rostro y le desagrado todavía más—

— Por sí no recuerdas mis padres son alfas —dijo mirándola, cuando se puso recta en su lugar tomó tamaño y más porte— si solo dices esas estupideces me desagradas más —la miro fijamente intimidado a la omega al instante—

— Siempre eres muy agresiva —la vio hacer pucheros— te iba a dar chocolates —

— Pues deberías comertelos, yo los tirare a la basura —dijo volviendo a ignorarla, su maestro favorito entró al aula, a menos que fuera algo reglamentario el nunca faltaba a clases—

Volviendo su mirada al frente la alfa se dedico a prestar atención ignorando olímpicamente a la tipa molesta.

{...}

— ¿Quien dijiste que eres? —preguntó Lisa con el ceño fruncido a la omega delgada frente a ella, tenía el pelo negro como el carbón y una piel blanca, Lisa pensó que de verdad debería tomar algo de sol parecía un fantasma—

— Haneul —respondió la omega cruzando los brazos en su pecho, casi llamando por la atención de la alfa, sin embargo Lisa parpadeo confundida no recordando quien era— la omega que se sentó junto a ti desde los 8 a los 14 —

Ante la mención de lo último el rostro de Lisa se torno serio y luego una mueca total de desagrado atravesó por el, sin la mínima intención de disimular torció más el gesto dejando en claro su hastío por verla.

— ¿Y que quieres? —preguntó a punto de irse de ahí, estaba esperando a Jennie para comer algo y se había encontrado a una molestia—

— Me preguntaba si... —

— Estoy ocupada —corto el asunto dándose la vuelta, Jennie ya iba a su dirección y tener una molestia cerca la tenía de mal humor, una jodida semana para salir de clases, en una cita con su novia y sentía que todo se arruinaba—

— Déjame asustarla —gruñó su lobo en su interior— Si nuestra omega nos ve se va enojar —

— ¡Lisa disculpa la tardanza! —grito Jennie a lo lejos, casi asustando a la alfa quien no la sintió venir— mi mamá no dejaba de preguntarme sobre ti —

Sintiendo el mal humor disiparse Lisa sonrió en dirección a su novia antes de dejar un suave beso en sus labios, la risita de Jennie transportando su mente a la fantástica sensación de tener a la omega cerca.

— Es tan linda —chillo el lobo dando vueltas, Lisa sintió como se le revolvía el estómago—

— Amor, ¿Quien es ella? —preguntó Haneul rompiendo la burbuja de la otras dos, apenas aprecia y resultaba que no tendría oportunidad de siquiera mejorar su descendencia—

— No me digas así, es desagradable —gruñó la alfa dándose la vuelta y encarando a la pelinegra—

Jennie por un momento se había sentido insegura, hasta que recordaba que la alfa era un lindura total y nunca había hecho nada malo con ella, claro, aparte de rechazarla en el celo, bufo pensando en una entrometida.

— Más bien ¿Quien eres tú? —dijo Jennie moviendo a Lisa tras ella, la alfa sólo se dejó hacer, no le molestaba ir detrás de la omega, en general, cuando estaban en grupos Lisa siempre iba tras la tres omegas porque sentía que las cuidaba—

Lisa casi sentía que necesitaba palomitas para presenciar a su linda novia Jennie interferir por ella o cuidarla a su manera.

Solto un suspiro de enamorada cuando la escucho reclamar y casi quería volar en su lugar, la palabras de Jisoo llegaron a su cabeza.

Era una dominada según las otras dos pero no le importaba.

{...}
— ¿Estas enojada? —preguntó Lisa llevando las bolsas de compras de Jennie, eran varias pero no eran pesadas—

— No —respondió viendo la ropa frente a ella, luego miró a Lisa quien tenía la cabeza ladeada y miraba dentro de las bolsas— mejor vamos por algo de comida, debes tener hambre —

— ¿Un helado? —preguntó la alfa acercándose a Jennie mientras cargaba las bolsas—

La verdad sea dicha Jennie si estaba enojada, o al menos eso intentaba, los pucheros y cariños de Lisa se la ponían difícil.

¿Cómo enojarse con su bebé grandota?

— Vamos por un helado bebé —sonrió  Jennie tomando la mano de Lisa quien había pasado las otras bolsas a una sola mano—

Relamiendose los labios cuando los sintió secos Lisa deposito un beso corto en los labios de Jennie y sonrió cuando ambas caminaron con tranquilidad.

— ¿De verdad te habías enojado? —preguntó la alfa viendo el perfil de la omega, es tan bonita—

— Trataba de enojarme, pero me la poner difícil si haces morritos por mis gestos —Rió bajito la omega entrelazando los dedos con Lisa, atraían las miradas de las personas alrededor—

Jennie trataba de ignorar la manera en que aveces escuchaba, y con aveces se refería a frecuentemente. Como se decía que el alfa iba al frente, incluso en una simple caminata.

— No me gusta que estemos enojadas —respondió la alfa tratando de defenderse de lo que Jennie decía—

— ¿Por qué te incluyes? —

— Es que Haneul me hizo enojar —dijo con una cara seria de nuevo, Jennie debía prepararse mejor para sus cambios de expresión— es muy molesta y ni siquiera me acordaba de ella —bufo, un leve aroma a molestia rondando alrededor donde pasaba, las personas se volvían a alejar de a poco, la omega pensó en que Lisa había dejado los supresores y el aroma era más fuerte—

— Mejor vamos por el helado y te olvidas de ella —hablo Jennie apretando un poco donde sus manos estaban enlazadas—

La novia de Jennie era un alfa pura que no gustaba mucho de seguir pautas, probablemente tampoco ponía atención a lo que eso significará.

No estaba disconforme con eso, Jennie estaba dispuesta a cuidar a su alfa.