Capitulo 1

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Dean le echó en la cara agua bendita. El demonio intentó quitarse las cuerdas que le mantenían atado a la silla mientras gritaba por las quemaduras de su piel.

- Te lo preguntaré una vez más: ¿dónde coño está Lilith?

- Jamás te lo diré, Winchester.

Dean se rió entre dientes y le echó otro chorro de agua bendita. El demonio volvió a gritar de dolor.

- ¿Qué me dices ahora? -el demonio se acercó a Dean, él también se acercó pensando que le iba a dar algo, pero el demonio le escupió en la cara. Dean se limpió la cara y le pegó un puñetazo- Ya veo que te gusta jugar -el demonio sonrió. Cuando Dean iba a decirle algo, Sam bajó las escaleras- ¿Ocurre algo, Sam?

- Vamos arriba a hablar.

Sam subió y Dean le siguió, pero antes le clavó su mirada al demonio.

- No te preocupes, no me moveré, me gusta este sitio, es acogedor.

Dean le ignoró y subió. Sam estaba guardando sus cosas en una bolsa.

- ¿A dónde vas? -preguntó Dean intrigado.

- He... quedado con Ruby.

- Eh, eh, eh, ¿habéis quedado? -Sam asintió con la cabeza- Tú y Ruby, solos, no me gusta la idea -Sam resopló.

- Dean, ya soy mayorcito, no necesito que seas mi canguro.

- Ya lo sé, pero no me gusta que quedes con ella, oculta algo.

- ¿No te parece que exageras?

- No, esa esconde algo, y pienso descubrir que es.

- Sabe como evitar que vayas al infierno.

- ¡Oh,venga, Sam! ¡Eso es mentira! Hice un trato, y nadie me puede salvar de esto.

- Aunque sea así, no voy a dejar de intentarlo hasta el último minuto.

- Pues en cuatro meses podrás dejar de preocuparte.

Sam resopló.

- Podrías ayudar, ¿sabes? -dijo Sam con un cierto tono de irritación.

- Mira, Sam, yo solo quiero acabar con Lilith antes de ir ahí abajo para que puedas vivir tu vida sin que tengas que preocuparte de esa zorra.

- Dean... -el claxon de un coche interrumpió la conversación- Tengo que irme.

- Haz lo que quieras. Yo seguiré con nuestro amigo silencioso.

Sam sintió y se fue. Mientras tanto, Dean bajó. Al verle el demonio sonrió.

- ¿Seguimos? -dijo el demonio con la misma sonrisa que antes.

- Sonríe mientras tengas dientes - Dean cogió de la mesa un martillo.

* * * *

Sam y Ruby pararon en un motel.

- Sam, podría haber conducido yo -dijo la rubia mientras entraba en la habitación.

- No -dijo Sam tajante.

- Todavía no te fías de mí, ¿verdad?

- No, todo los demonios que he conocido me han intentado matar.

- Oh, Sam, hay demonios buenos, como yo.

- Me da igual -Ruby se quitó la chaqueta y se tumbó en la cama- ¿Qué haces?

- Prepararme para dormir -Sam se cruzó de brazos.

- ¿Te crees que vas a dormir aquí? - Sam se empezó a reir.

- No me iras a dejar ahí fuera con ese frío -Ruby se levantó y se puso a centímetros de Sam- ¿Verdad?

- Pidete una habitación.

Ruby se apartó.

- Buenas noches, Sam -dijo Ruby decepcionada por la respuesta de Sam.

Ruby se fue y Sam se sentó en la cama.

* * * *

El demonio estaba herido y lleno de cortes. Dean dejó el cuchillo encima de la mesa.

- ¿Vas a contarme dónde está Lilith? -dijo Dean esperando una respuesta satisfactoria.

- Nunca.

Dean resopló y cogió otra vez el cuchillo. El teléfono empezó a sonar arriba y Dean dejó el cuchillo encima de la mesa.

- Vuelvo enseguida -dijo Dean y subió las escaleras. Y cogió el teléfono- ¿Si?

- Dean, tengo un caso para ti y Sam -era Boby con el mismo tono amistoso de siempre.

- Sam no está ahora mismo.

- ¿Dónde está? -Dean resopló.

- Se ha ido con Ruby.

- ¿Qué?

- Ya lo sé, pero ¿qué querías que hiciese?

-Decirle "no" hubiese sido un buen comienzo -dijo Boby subiendo el tono de voz.

- Él sabe cuidarse solo, Boby. ¿De qué trata el caso?

- Se han allado varios cadáveres sin una gota de sangre en su cuerpo en Missoula, Idaho.

- ¿Vampiros?

- Seguramente.

- Está bien. Voy para allá.

- ¿Y Sam?

- Que vigile a esa puta.

- Dean, no creo que sea buena idea que vayas tú solo.

- Boby, soy mayorcito.

- Mandaré a alguien para que te ayude.

- Boby...

- No me intentes llevar la contraria, chico. Soy muy tozudo.

- Ya lo sé. Adiós.

Dean colgó y bajó al sótano. El demonio sonrió al verle.

- Tengo que irme, pero volveré -dijo Dean algo enfadado.

- Buen viaje -dijo el demonio entre risas.

Dean le pegó un puñetazo y subió las escaleras. Se preparó y se fue con el impala hacia Idaho.

Sombras tentadoras (Cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora