El descendiente del Titán y los Dioses Griegos (Saga 0)

Ella pensaba mucho en ti.

Lejos de todo, en el confín más alejado de las tierra del infame Crono, se encontraba una cabaña muy acogedora, que de no ser porque no habia nadie en miles de kilómetros a la redonda podía camuflarse fácilmente en un poblado de los pocos humanos que sobrellevaban el tener que vivir bajo el mandato del así llamado "Titán loco"

Un pequeño bebé gateaba por la sala de la cabaña, estaba vestido con un pañal solamente, a pesar de su prematura edad tenía un cabello negro como la noche, ojos azules tan profundos que parecias visualizar el más profundo de los mares y su piel tenía una singular tonalidad pálida. El infante detuvo su andar al mover su cabezita hacia arriba y mirar una foto, el bebé se sentó y miró atentamente la foto.

Dicha fotografía mostraba a un hombre, ojos azules, cabello rubio peinado apropiadamente y que vestía un traje que lo hacía ver muy elegante abrazando por detrás a una mujer joven y bastante hermosa, su cabello era negro como el del infante, ojos morados como si fuesen un par de amatistas que resaltaban más por su pálida piel, tenía el vientre un poco grande, y tanto la mano del hombre como la de la mujer tocaban el vientre... Se veían muy felices en esa foto.

???: Sabía que te encontraría aquí.

Se escuchó una voz, y el hombre de la fotografía ahora vestido con una túnica blanca cargó en brazos al pequeño que se aferró a su padre.

Bebé: Papá... -dijo con una sonrisa-

???: No es justo, conoces las reglas, al caer el sol debes ir a tu alcoba, eres alguien en desarrollo y necesitas dormir -dijo con seriedad pero al ver como su hijo arrugaba la nariz en señal de desagrado rió- Te pareces tanto a tu mamá Theo.

El pequeño ahora identificado como Theo apoyó su cabezita en el hombro de su padre y continuaba observando la fotografía. El hombre volteó también a la par que su rostro formaba una expresión melancólica.

Igneel: Pasó tanto tiempo... -tomó la foto y la acercó para que su hijo la viese y posteriormente sentarse en uno de los muchos sillones que había en la sala- Esta foto nos la tomó un muy buen amigo de mami, tan solo ella estando embarazada 5 meses de ti, recuerdo su expresión cuando le dijo que Amath se casó en secreto con Igneel, el titán de la luz... -el bebé rió, como si entendiese lo que su padre decía- Ojalá ella estuviese aquí con nosotros, ella siempre pensaba en ti, pensaba en todo lo que podíamos haber hecho juntos, pensaba que podía decirte para que fueras por el camino correcto, pensaba que prepararte de comer cuando terminase el dia, pensaba... -iba a seguir hablando pero sintió como el infante dormía plácidamente sobre su hombro- Jeje -con una pequeña risa empezó a caminar a las habitaciones- No hay duda de que harás cosas increíbles hijo mio. Tu madre lo sabía... Y tengo la bendición de saber que no se equivocaba.

Continuará...