Turn off the ligths-Song Minho

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Cómo Sunhee había mencionado iniciaría la semana de exámenes. Nadie piensa en nada más, solo estudiar y aprobar para salir del semestre, en realidad todos están ocupados; ves menos estudiantes por las calles, saliendo, en el karaoke y más en las bibliotecas o estudiando en los cafés.

Así fue mi domingo y también los siguientes días de la semana, solo estudiar. Para el jueves lo exámenes estarían hechos y el viernes sería casi libre, hablaba con mis amigos te ves en cuando y ya ni con Mino.

Creo que lo único que hice con el fue dejarle un chocolate con una carta en su locker deseándole suerte en sus exámenes. También cuando le devolví su suéter y demás aunque fue rápido ya que iba a llegar tarde a clases y no iba a tener permiso para hacer el examen.

Al terminar mi último examen me sentí libre y feliz ya que mis calificaciones habían salido bien, mi puntaje más bajo había sido 9 y el de hoy era casi un 10. Corrí hacia los pasillos directamente al salón de Mino para poder verlo e invitarlo, mis padres y yo cenaríamos hoy juntos y recuerdo bien haber tenido el permiso de invitarlo a cenar algún día y hoy sería.

Heche un vistazo al interior de su salón por la ventana, directamente a su asiento que ya se cual es pero no estaba.

Así que fuí a la segunda opción, el árbol. Ahí estaba de pie fumando, con el cigarrillo entre sus dedos mientras tambaleó su cabeza hacía atrás para aventar el humo.

-Eso te hace mal, no lo hagas-

-¿Crees que no lo se?-

-¿Lo puedes apagar? No me gusta como huele y me hace daño-

Lo recargo en el tronco para así apagarlo.

-¿A qué viniste?¿Qué quieres?-

-Mira- enseñó la hoja de papel -mi calificación es buena y ¿sabes qué? Para celebrar te invito a mi casa, vamos a cenar juntos-

-¿Juntos?-

-Si, recuerda que mis papás te invitaron alguna a comer, hoy es el día-

-Anda vamos, ven conmigo- Tome su mano y la empecé a jalar un poco

-Minseo pero...-

-Asi con el uniforme está bien ¿Aceptas?-

-Esta bien-

Tomó su mochila del suelo y la pasó a su hombro. Apuntó a mi mochila y extendió la mano, dudosa se la di y el la sostuvo.

-Vamonos-

Empezó a caminar, corrí detrás de el y tome su mano. Y esta vez no me dijo nada.

-¿Porqué no estabas en tu examen? ¿Terminaste pronto?-

-No asistí-

-¡Song Minho! Los exámenes son importantes-

-Solo me presento al último, lo paso y listo, no debo de hacer todos-

-Asi puedes reprobar-

-Estare un año más contigo-

...
Al llegar a casa nos quitamos los zapatos. Lo invite a pasar, subimos a mi habitación para dejar las mochilas. Volvimos a bajar a la sala, mi mamá no estaba, había dejado una nota diciendo que fue a comprar unas cosas para la comida y papá llegaba más tarde del trabajo.

-¿Quieres jugar un juego? Tengo varios arriba-

-No, así está bien-

-¿Qué quieres hacer? ¿Una película? ¿Quieres salir al jardín?-

-Me recuerdas que hago aquí por favor-

-Solo te diré porque dijiste por favor, te invité a cenar-

-Claro que ya sabía... vayamos afuera-

-Deja traer una manta-

Desde pequeña me encanta la idea de tener picnics así que cuando llegué aquí y ví que la casa tenía un lindo patio con césped, paso mucho tiempo ahí haciendo un picnic, eso intento. A veces preparo algún postre y salgo a leer,una que otra vez a tejer que es lo que estoy aprendiendo últimamente y no lo hago mal; hasta simplemente solo ir a dormir viendo las nubes.

Extendí la manta mientras el estaba recargado en el marco de la puerta esperando. Cuando estuvo lista me senté y lo invite a hacer lo mismo, el lo hizo con cierta flojera.

-Acuestate así, veamos las nubes- me recosté y apunte al cielo -Hoy son muy bonitas y tan esponjosas-

El hizo lo mismo quedándose quieto con la mirada arriba.

-¡Minseo! ¿Ya estás en casa? Ya llegué-

Mi madre desde la puerta de la entrada anunció que había llegado, me levanté y fui hacia ella para recibirla.

-Mamá hoy invité a Mino para comer juntos-

-¿Tu amigo?-

-Si ¿Está bien?-

-Si claro, la comida está casi lista...tu papá vendrá hasta más tarde, nosotros podemos comer primero que el-

-Okay- Se notaba mi felicidad con esa gran sonrisa que tenía en la cara

Corrí hacia Mino para decirle que me habían dado permiso.

-Ven, tienes que saludar- lo jale del brazo para intentar levantarlo que por cierto no pude hasta que el se levantó. Al levantarse su cara quedó tan cerca de la mía, sentí mi sangre hirviendo y muchos nervios pero el solo sonrió y fue directo adentro a la casa.
Doble la manta y pude escuchar a Mino saludando a mi madre, sonaba tan formal y lindo al mismo tiempo.

...
-¿Hay algo que no te guste comer?-

-Todo está bien-

-Bueno...entonces podrás comer lo que preparé hoy-

Sirvió los platos y nos sentamos en la mesa, agradecimos por la comida y empezamos a comer. La comida de mamá era la mejor como siempre y después de una semana tan pesada sabía deliciosa.

Mamá interrogaba un poco a Mino con preguntas "¿Tienes hermanos?" "¿Tus padres en que trabajan?" "¿Eres más grande que Minseo?" "¿Qué piensas estudiar?" Y más de esas preguntas.

...
-Ya terminé de lavar los platos-

-Minseo, ya debería irme-

-oh..¿Tan pronto? Está bien, me encantó que vinieras conmigo-

-Ire por mi mochila arriba-

-Yo también voy-

Subimos y abrí la puerta de mi habitación. Esta no era desconocida para el, me senté en la cama mientras el guardaba algunas cosas.

-Espero que no te olvides de nada, igual no traías mucho- balanceando los pies

Se levantó y antes de tomar la mochila fue hacía mi.

-Minseo ¿Qué te gusta de mi?-

Quedé congelada sin saber que decir.

-Tus ojos...-dudosa

Ante esta respuesta Mino la miro fijamente y más de cerca.

-¿Segura?-

-Mmm si-

-Entonces ¿Porqué sigues mirando mis labios?-

El se acercó, tocó su labio inferior y la besó, esta vez fue más profundo y casi al punto de llegar a morder su labio inferior. Se separó dejándola confundida.

-Piensa mejor la siguiente vez que pregunte, ahora que ya eres mi novia debes fijarte mas-

Abrió la puerta y salió, yo no pude hacer nada, no pude preguntar nada, mis labios se sentían raros fue algo nuevo, en realidad no lo mencioné antes pero cada vez que besaba a Mino, cada vez era diferente a la anterior ninguna vez era igual a otra.

Pronto escuché como le agradecía a mi mamá por la comida y se iba. Mientras yo solo me quedé sentada.

Song Minho y yo....