Capítulo 8

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Hay dos chicos parados frente a frente en una desolada área escolar. Ambos permanecen en silencio desde hace varios minutos, buscan las palabras adecuadas para hablar de aquel tema importante de sus corazones.

Y es recién, después de unos minutos más, que dos voces al unísono resuenan:

"Tengo que decirte algo"

"Tengo que decirte algo"

Los estudiantes de ultimo año se miran fijamente antes de sonreír. Pleum recuerda que en el pasado solían hablar al mismo tiempo siempre, sus pensamientos eran iguales y la mayor parte del tiempo decían las cosas a la vez sin intención.

Cuando se conocieron, realmente quedaron sorprendidos por la sincronización. Era algo que los hizo darse cuenta de la química que tenían, y aunque en las peleas solían gritar al mismo tiempo, realmente no era algo que los sacaba de quicio. Se habían acostumbrado con el paso del tiempo.

"Empieza tú", dice Pleum con una sonrisa. Decidido a dejar que Na hablara primero.

"... Lo digamos al mismo tiempo" ofrece Na, quizás es solo una forma para que el impacto de las palabras no sea doloroso.

Pleum asiente con la cabeza. Ambos toman una respiración profunda y sus manos se entrelazan, dándose la fuerza suficiente para continuar con la conversación.

"Me gusta alguien más", dice Na.

"Me estoy enamorando de alguien mas", admite Pleum.

Y aunque los chicos hablan al mismo tiempo, las palabras se entienden con claridad. A pesar de que, aquellas palabras, podrían causar un sentimiento doloroso en cualquier otra relación... estos niños solo se miran en silencio, suspiran profundo y sueltan una carcajada limpia.

"¡Maldición!" Grita Na secando las lágrimas de sus risas, luego se sienta en la piedra a un lado de la pared del gimnasio, "Por un momento creí que..."

"¿Me ibas a romper el corazón?" Termina Pleum obligándose a dejar de reír. Solo deja una brillante sonrisa en su rostro, "mierda, creí que yo iba a romper el tuyo"

Pleum se sentó a un lado de su, todavía, novio. Na apoyó su cabeza contra la pared, mira hacia el cielo antes de mirar a Pleum.

"¿Nong Prem?" Preguntó de repente Na con una sonrisa hermosa. Na era alguien que tenía una apariencia envidiable, su rostro era adorable y provocador, sus expresiones eran similares a las de un modelo profesional, y la figura era mejor que las de muchos otros sin siquiera esforzarse. "Es Nong Prem, ¿verdad?"

Na no siempre había sido alguien celoso; Al comienzo de su relación, fue alguien comprensible, incluso le gustaba emparejar a su novio con otras personas y gritar de emoción. Era un niño carismático y que todos amaban cuando lo conocían.

Hijo de dos actores y modelos famosos internacionalmente, era imposible que su sola presencia no dejara asombrada a las personas.

"¿Es tan obvio?" Pregunta Pleum, estira su mano y acaricia la mejilla del niño adorable que se inclina curioso hacia él.

"¿Piensas que me puedes engañar a mi? ¡Por favor! Te conozco mejor que la palma de mi mano," Na se burló, rozando su nariz contra la mejilla de Pleum como un hábito entre ellos dos, "¿cuantos años hemos salido ya, Pleum?"

"Tres años" dijo Pleum riendo por las cosquillas que le causó las acciones de Na.

"... Tres años..." El niño de hermosa figura se vuelve hacia su sitio original. Pero sujeta la mano grande y cálida del otro que hace parecer a su mano pequeña, "Supe desde el momento en que te dio las galletas que ibas a caer por él en cualquier momento. Lo vi en tus ojos, pero, ya sabes... Al menos debía intentar proteger lo mío, ¿no? Seria un tonto si le dejaba el camino fácil al pequeño Prem"

CONFESSION (español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora