Capítulo 1

2.9K 218 30
                                    

(Alarma sonando) 

— No me quiero levantar, otro ratito más... — apague la alarma con suma pereza mientras me fijo que ya son las 07:00 de la mañana— ¡voy tarde!

Y así comienza mi primer día de clases, he estado 6 meses buscando empleo como profesor de literatura, y gracias a Dios logre encontrar, pero si llego tarde... Adiós trabajo.

Salto literalmente de la cama, no tengo tiempo de desayunar, por lo que me ducho rápidamente, me pongo el traje más casual que tengo, tomo mi bolso y salgo.

Cuando voy caminando, aunque parece más un trote que caminar, hago la lista mental de todo lo que tenía y tengo que hacer.

· Despertar, listo
Ducharse, listo
Desayunar... Está en espera
Actitud positiva para trabajar, listo
Ser sociable con los demás profesores, esperemos
Almorzar... ¡No traje mi almuerzo!

Al parecer hoy deberé morir de hambre- al menos que algún profesor me alimente...

Mientras camino, veo que estoy a una cuadra de la universidad, menos mal, reviso la hora en mi celular, 07:50, las clases comienzan a las 08:30 supongo que no llegare tan tarde como pensé.

Al entrar no me pude dar el lujo de observar la universidad, otro día tendrá que ser, camino con prisa al salón de profesores para recibir mis indicaciones y que me asignen mi primer curso. Cuando entro no hay nadie, ¡falle! Primer día y ya todos deben estar en sus salas planeando las clases, me siento en la silla frustrado y apoyo, más bien lanzo, mi bolso a la mesa y recuesto mi cabeza sobre él.

— Será mejor que me vaya haciendo la idea de mi despido— suspiro, y me pongo a patalear como niño chico, si alguien me viera ahora me daría mucha vergüenza.

— Oh, tú debes ser el profesor nuevo de filosofía— ¿ah? Levanto la cabeza con sorpresa y veo a una linda joven, con una radiante sonrisa, con su mano estirada esperando mi saludo, correspondo a su saludo con algo de timidez — me llamo Hyojung, soy maestra de matemáticas y física.

— Mucho gusto— me levanto de la silla y me fijo que es solo un poco más baja que yo, y su llamativo cabello rojo me encandila, además que tiene una linda sonrisa, más bien, radiante sonrisa. Inspeccione de reojo su manera de vestir, falda de cuero negra, una blusa azul con una chaqueta negra encima, y unos zapatos de taco aguja, supongo que debe doler andar todo el día con zapatos así. Pero por sobre todo lo superficial, lo que más destaca es su amable mirada y reitero, radiante sonrisa - me llamo Choi San, pero por favor solo dime San.

— Encantada, San... Jeje, es raro llamarlo así, cuando apenas nos conocemos.

— Oh, tienes razón, señorita Hyojung.

— ¡No me trates de señorita! Me hace sentir muy niña, ya soy una joven profesional — sus mejillas adquirieron un tierno y bello color rojizo, me agrada, además que su personalidad es muy tierna — como soy la primera en llegar de todos los profesores te daré un recorrido y te indicaré cual será tu primer curso.

— ¿Enserio? Muchas gracias, no sabía qué hacer, estaba desesperado, incluso pensé que me iban a despedir en mi primer día.

— ¿Por eso te movías de forma rara estando sentado? — Ella... me vio haciendo eso, ¡qué vergüenza! — jejeje me pareció muy tierno, creo que nos llevaremos bien San oppa.

Tan solo incline mi cabeza y pase mi mano por mi cabello, estaba nervioso y avergonzado, pero ella en vez de burlarse me comprendió e incluso le parecí tierno. Ya tengo una amiga, o al menos una conocida, Hyojung dejó sus cosas sobre la mesa mientras se puso a buscar en las repisas de la sala lo que al parecer sería mi horario y demás, luego de unos minutos buscando saco una carpeta y me la entregó.

Le di una pequeña revisada a la carpeta, pero Hyojung me dijo que la siguiera, supongo que me irá a mostrando la universidad mientras me indica cual será mi salón.

— Disculpa Hyojung, ¿te puedo preguntar algo?

— Si claro, pregúntame, mientras no sea sobre mi edad jajaja.

— No, no, nada de eso — niego con la cabeza, no quiero arruinar la imagen que ya tiene de mi¿Hace cuánto que trabajas acá?

— M... Casi nunca me preguntan eso jajaja, llevo 2 años, esperando estar muchos más.

— Espero quedar en el trabajo y establecerme profesionalmente acá, sería un gran sueño cumplido...

Ambos nos miramos y sonreímos con sinceridad, en el camino me fue explicando cómo funcionan las cosas aquí, los horarios de la mayoría de los profesores, el de los alumnos, los lugares aptos para fumar, el comedor de profesores y el de alumnos, los baños, etc.

Luego de pasar de un edificio a otro llegamos al tercero, que queda al frente de los otros dos, Hyojung me indica que ese edifico es prácticamente nuevo en comparación con los otros dos, por lo que está algo apartado.

Subimos al segundo piso, mientras aprovechaba de mirar al patio, este edificio tenía una gran vista, al llegar al segundo piso me indicó donde sería mi primera clase, sala 306, primer curso de literatura, estudiantes de filosofía.

— Bueno... ¿San? Lo siento, aún se me complica ser tan informal, espero que tengas un buen primer día, recuerda que apenas termines tus clases, te acercas a la oficina del rector para que te de tu horario completo. Ten un bello día — me sonríe de manera muy alegre, mientras le agradezco todo el recorrido que me hizo, prometo devolverle el favor con un café, pero se niega, aunque trate de insistir no logre convencerla y se marcha a sus clases mientras me sonríe y agita su mano en una sencilla despedida, le devuelvo la sonrisa y entro al salón.

— Muy bien San, ahora estarás solo, da lo mejor de ti y demuestra de lo que eres capaz.

— Disculpe, pero está tapando la entrada.

— Disculpen, adelante — no me había fijado que ya había estudiantes esperando por entrar.

Los saludé con una leve reverencia y entré con ellos a la sala, me sorprendió lo grande que era a mi gusto, aproximadamente cabían unos 40 estudiantes, poco a poco la sala se fue llenando. Al igual que mis nervios y ansiedad crecían a medida iban entrando.

Deje mi chaqueta sobre la silla, revise por última vez la hora en mi reloj 08:28, en dos minutos más deberían de comenzar las clases, fije mi mirada en todos los estudiantes que poco a poco fueron sacando sus cuadernos, algunos hablaban entre sí, otros jugaban con su celular, algunos me miraban sin expresión alguna y otros...Se estaban ¿besando? 🤦♂️

08:30 hora de la verdad, me puse mis lentes ópticos, sin ellos no podría ver bien todo el material que les debía de entregar hoy, al mirarlos a todos me sentí algo "no bendecido" todos en el salón eran jodidamente atractivos, era una conspiración del universo en contra de mí, es porque a mis 24 años, no tengo un cuerpo de idol coreano, o una gran estatura, o quizás unos ojos de colores que irradian sensualidad. Solo era un simple maestro de 1.75, contextura delgada, no tenía abdominales ni nada parecido, pero si debía admitir que mis brazos eran muy fuertes, lo que más me gustaba y rescataba de mi apariencia era mi rostro y cabello negro, mi primo siempre me decía lo hermoso que era mi rostro. Pero no debo distraerme más, o mejor dicho compararme más, y debo dar comienzo a mi vida profesional...

— Muy buenos días clases, espero que este sea un buen año de aprendizaje para ustedes como para mí, me llamo Choi San, tengo 24 años, y como podrán ver, este año seré su profesor de Literatura, espero que cada uno de ustedes de lo mejor de sí, al igual que yo trataré de dar lo mejor de mí, una vez finalizada mi presentación... demos comienzo a esta clase. 

Mi quinta estación "Woosan"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora