Eres mi deseo, mi obsesión. [Terminada]

Esta vez fue diferente.

Diego yo quiero estar contigo pero no sé que hacer, estoy tan confundida, me siento tan niña para ti, hay cosas que tú no dejarás de hacer y no sé que hacer, yo estaba enamorada de ti, me gustas mucho, eres perfecto, no quiero que te vayas, eres el chico de mis ojos pero no sé que hacer, no puedo con muchas cosas, ya no te amo como antes pero no quiero que te vayas, por favor no lo hagas, podemos buscar rehabilitarte en algún lugar cerca de aquí y puedo ayudarte pero no te vayas lejos por favor... hablé mientras lloraba desconsolada.

Calma bebé, buscaremos una solución pero primero debes calmarte. Quizás tu lugar no es conmigo, aunque me duele, me cuesta y te amo pero quizás hay alguien más para ti. Tal vez es una prueba que nos pone la vida, separarnos para ver que tal y si no resulta puede que nos vuelva a unir, todo es cosa de tiempo, no sabemos lo que la vida nos tiene destinados. Pase lo que pase, tú siempre serás la chica a la que yo amaré. Trató de consolarme.

No, no quiero a nadie más, volvamos a intentar, no te vayas. Traté de calmarme, lloraba apoyada en su pecho.

Diego me miró a los ojos y me besó, creo que es lo mejor bebé, mi decisión ya está tomada. Me abrazó fuerte. Si quieres pasamos el tiempo que queda juntos, podemos salir a caminar, jugar y hacer otras cosas, yo no se cuando volveré, te parece? Me miró mientras me preguntaba.

Está bien, me duele pero si es lo mejor.. si la vida nos tiene destinados estar juntos, nos volveremos a encontrar en otro momento. Sonreí pero no estaba feliz.

Estaba pensando en que quizás sería la última vez que iba a estar con él, mi deseo por él, mi obsesión era algo enorme pero esta vez quería simplemente tener intimidad con él, no tener sex*, hacer el amor con él.

Comenzamos a besarnos, le acaricié suavemente la pierna, comenzamos a entrar en calor, fue todo muy lento, diferente a las miles de veces anteriores, él nunca se había dado cuenta de que lo usaba sexualmente pero esta vez no era así.

Comencé a besarle el cuello suavemente, nos fuimos a su habitación y nos recostamos. Comencé a tocar su abdomen por debajo de su camisa, Diego comenzó a quitarme la ropa de a poco, suavemente... luego de un rato quedamos ambos completamente desnudos, me puse sobre él y comencé a moverme suavemente.. cerré mis ojos y me dejé llevar. Mientras me movía sobre él apoye mi cabeza sobre su hombro, lo abracé y comencé a gemir suavemente, están sintiendo mucho placer, esta vez era muy diferente a las veces anteriores, la suavidad, el juego previo y todo lo demás. Diego se acomodó quedando entre sentado y recostado sobre la cama y yo aún sobre él, no paraba de moverme, estaba abrazada a él, gemía suavemente en su oído, cada vez mi respiración era aún más rápida, estaba sintiendo escalofríos...

Ay... Diego... dije entre gemidos con mis ojos cerrados y sin parar de moverme... Sentia su cuerpo cálido y su respiración, escuchaba apenas sus pequeños gemidos, él acariciaba mi cuerpo mientras me ayudaba a moverme...

Ohh.. Diego.. espera.. dije entre gemidos cuando...