Moon-OS NamJin Omegaverse

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Permítanme contarles una historia, donde tuve la oportunidad de tener un ángel en mi vida, realmente insólito, maravilloso, era un sueño; pero como todo sueño... Algún día debía despertar. Y tarde o temprano, los ángeles deben volver a donde pertenecen.

Jin hyung era hermoso, y no sólo por ese rostro tan delicado que presumía todo el tiempo, si no por la belleza que guardaba en su corazón.

Extraordinario.

Siempre pensando en los demás, preocupándose y haciendo lo posible para mantener a todos felices, y guardandose lo peor para él sólo para que no llegará a afectar a los demás. Pero cualquier bomba contenida tendrá que explotar.

Le había dicho que llegaría tarde, pero mis planes se habían cancelado, por lo que llegué al dormitorio que compartíamos por la Universidad mucho más antes. Lo encontré llorando en el baño y en contra de cualquier cosa que él hubiera querido, force la puerta y entré de golpe. Se había asustado y se mantuvo inmóvil mirándome, con ojos cristalinos y su cara muy roja, respiraba de forma agitada y hasta diría que con dificultad. Rápidamente fuí hasta él y lo acune en mi pecho; lejano a saber sus razones para romperse de esa forma solo lo mecia con cariño, mientras le susurraba un «Está bien, hyung, está bien» su aroma era amargo, contrario a lo dulce que siempre solía ser.

Quería calmarlo de alguna forma, quería hacerle saber que estaba bien liberarlo todo, pero él mismo buscó la forma de apaciguar sus sollozos aspirando mi aroma, que tanto parecía tranquilizarle. Hasta que su respiración se volvió más calmada pero seguía viéndolo pálido.

Lo guíe hasta su cama, en donde la tristeza le golpeó de nuevo y la desesperación provocó que contara todo lo que callaba su corazón.
Me dijo que a veces no se sentia como decía, que realmente no siempre pensaba que tenía un lindo rostro, que pensaba que no daba lo suficiente, o que no era suficientemente bueno para la carrera que estaba estudiando. Me contó que la Universidad se había llevado todo de él, que no tenía paz mental porque siempre tenía algo de que preocuparse; y volvió a romper en llanto.

Nunca habia imaginado que dolería ver a alguien quien es siempre fuerte llorar de forma tan dolorosa.

Decidí evocar mis sentimientos más dolorosos, que no eran muy lejanos a los suyos, y lo acompañe en el llanto; diciéndole con el dolor de cada sollozo que esta bien, que estaría con él. No me importaba que no fuera algo que «no haría un alfa», pero no iba a dejarle sólo.

Algo que ví que hacia era mantener la palma de su mano en su pecho, justo sobre su corazón. Parecía querer sentir sus latidos, o tal vez le dolía el pecho, no lo sé pero preferí no preguntar.

Al día siguiente desperté solo en la cama, él ya había ido a sus clases. Actuó como si nada hubiera pasado, y cada vez que intentaba tocar el tema lo notaba incómodo, así que preferí callar y hacer lo mismo que él, hasta que fuera él mismo quien decidiera hablar al respecto.

Fue una noche luego de que dijo que dormiría, pero ninguno de los dos podía conciliar el sueño.

«Gracias»

Derramaria mil lágrimas por que todas valdrían la pena si fueran por tí.

La luz de la Luna le iluminaba el rostro, casi parecía que la luz emanaba de él.

Maravilloso.

Dijo que había apreciado lo que hice, que por primera vez en mucho tiempo se había sentido realmente acompañado. Después de eso se levantó, observó el cielo a través de la ventana y pude ver un pequeño sonrojo. «La Luna es siempre tan hermosa» había dicho con voz suave, y luego preguntó si podía dormir conmigo; pude haberle dicho que lo mejor era mantener la distancia, pero sabía que luego me arrepentiria de ello.

One Shots de BTS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora