Enamórate de mí.

Cap. 3. La invitación.

El sábado por la mañana cuando limpiaba los vidrios y los bebés caminaban de un lado a otro trayendo y llevando juguetes que les había llevado su papá, el teléfono de Jimin sonó.

Corrió a ver quién era vio el nombre de su hermano.

Rápido contestó.

- Hola.

- Jimin ¿Cómo estás?

Jimin sonrió ampliamente.

Su hermano por fin lo había perdonado.

- Muy bien Nam ¿y tú?

- Jimin han pasado seis meses desde la última vez que nos vimos y mañana haremos una reunión en la casa de nuestros padres, me preguntaba si quisieras venir.

- ¿una reunión? - seis meses habían pasado rayos - no lo sé, tendré que preguntarle a Jungkook si le gustaría ir.

En verdad se quería golpear por seguir mintiendo.

- Yo mismo lo invitaré.

Rayos

- Nam, lamento tanto lo que sucedió, tú fuiste tan bueno conmigo y yo solo te mentí.

- Entiendo tus razones Jimin, pero ahora ya todo cambio, mi madre dice que quiere conocer a sus nietos. Además me tienes que felicitar yo también tendré mi camada pronto.

- ¿Jin está embarazado?

- Así es, mira aquí viene Jungkook deja que ponga el altavoz. ¡Jungkook ven!

Jimin escuchó lo que sucedía del otro lado de la línea expectante.

- Estoy invitando a Jimin a venir mañana a casa de nuestros padres ¿Te gustaría venir?

- ¿Una invitacion? ¿Alguien cumpleaños?

- En realidad todos queremos ver a Jimin, por eso es que nos reuniremos, ya ha pasado bastante tiempo.

- Si él quiere, por mi está bien

- Jimin tu alfa ya dijo que si, nos vemos mañana.

- Está bien.

- Olvidemos el pasado.

- Olvidar... eso es bueno.

La llamada se cortó pero Jimin estaba en shock. ¿Cómo era eso que todos lo querían ver?

Jimin estuvo toda la tarde pensando en eso, hizo de comer y llevo a los bebés al parque que estaba cerca del departamento. Se sentía raro que ahora ellos se interesaran en él tan de repente.

Pero a decir verdad lo más seguro es que quisieran saber si su relación con el alfa era buena.

Seguro todos esperaban que el alfa lo maltratase o algo así.

Molesto por encontrar lógica a ese razonamiento no pudo dormir, incluso escucho cuando el alfa llegó y prendió la luz de la cocina. Escuchó que comía.

- Deberías dormir a los bebés en mi habitación para que tú puedas dormir en tu propia cama.

Claro que se daría cuenta que estaba despierto.

- No lo había pensado.

Pero estába muy molesto para dormir.

No quería ir a esa reunión, lo que su familia creía que era una relación de amor más bien era un ejercicio de evitamiento del cual ambos ya eran expertos.

- ¿Qué sucede que estás tan angustiado?

- Nada - respondió Jimin en automático, se sentó - llevaré a los bebes a tu habitación.