Más allá de la atmósfera de Gea se oculta un misterio. La misión "Una nueva patria", llamada por los mismos tripulantes como "Sin retorno" viajó durante 42 años hacia la superficie inerte de Trappist-1e, un planeta que, en papeles, tenía las condiciones necesarias para vivir. Nadie se esperó que al llegar a la órbita de aquella roca terraformada, un mensaje interrumpiría sus comunicaciones. Hay algo allí abajo, y es humano. Necesitan ayuda.