Si me preguntaran que es lo que siento por él no sabría qué contestar. Quizás es la forma en que me mira cuando conversamos de cosas triviales, solo para pasar el rato. Quizás es la manera en que sonríe, esa sonrisa torcida que hace que mi mundo entero tenga sentido. Quizás es la manera en que me abraza cuando nadie nos ve, porque así tiene que ser.