Rafaela se ve con caderas anchas y se siente diferente a su madre y a su hermana Aitana, que parecen modelos. En el colegio se siente invisible, salvo para las tres amigas que tiene. Dice que es tímida y callada, alejada de los varones e interesada por cosas que no puede compartir con sus amigas: los libros, el cine, el teatro y su violín. Sin embargo, su vida cambiará por completo.