Lo último que se esperó Wanda al ser secuestrada, era terminar en las manos de una mujer como Natasha Romanoff. Terriblemente poderosa, posesiva y seductora. Natasha no sabía porqué la había aceptado como un 'regalo'. Lo único que sabía era que en cuanto vio sus aterrorizados ojos verdes, supo que aquella castaña, era suya. Esta historia es una adaptación.