"Me voy a casar dentro de un mes y quiero que tu estés ahí acompañándome como mi padrino -Le dijo con felicidad mientras Adriel se hundía en la infelicidad". El día que por fin Adriel Bernal se armó de valor para decirle que la amaba a Adamaris Navarro ella le dio la noticia de que estaba comprometida y a punto de casarse con alguien más. Él ya no le confesó su amor porque no sabía si era lo correcto, porque ella ya amaba a alguien más y jamás lo elegiría a él. Este libro trata de dar el mensaje de que hay que aprovechar el tiempo con nuestros seres amados para hacerles saber lo que son para nosotros; lo tan felices que nos hacen: A nuestros padres, amigos, a la persona que amamos -aunque ella no nos ame-. No hay que dejar que la vida no los arrebate sin antes decirles como hacen que nuestra existencia es mejor con ellos a nuestro lado.