¿Qué esperar de la vida? Es una pregunta que siempre ha estado impregnada en mi cabeza. Sin embargo, soy consciente que no he hecho lo suficiente para crecer. La inseguridad me priva desde que tengo uso de razón y lo lamentable es saber que sigo estancada en el mismo escalón. Siempre he buscado lo bueno hasta en el alma más peligrosa. ¿Qué soy persistente? Lo soy. Sin ninguna duda, porque a pesar de todo, voy detrás de lo que quiero. Cuando pensé que mi vida no podía empeorar más... aparece Caleb. El chico más desconcertante que he conocido. Pero al igual que yo, con un pasado desastroso. Que deja heridas, que tal vez nunca superemos. Junto a él... me voy caminando hacia el mismo infierno.