AkaFurivember 2020

Día 23: Mascotas

Espero hayan leído los días anteriores, sobre todo el día 3 y el día 20, porque les di continuación uwu Una forma modesta de decir "Reciclé trama" x'''DDD 

El conejo Kou-chan y el gato Akai-chan tienen una vida pacífica viviendo con sus dueños: Akashi Seijuuro y Akashi Kouki, anteriormente apellidado, Furihata. Ambos son muchachos universitarios que tomaron la mutua decisión de casarse y vivir juntos en una casa, comprada por Akashi, obviamente, en lo que Furihata se va a acostumbrando a la vida de una persona medio adinerada, porque, siendo sinceros, no le gusta tener todo a la mano fácilmente, prefiere lograr las cosas con su propio esfuerzo antes que contar con el dinero de su adinerada pareja. Por eso viven en esa casa y no en la mansión, porque fue un pedido pequeño por parte de Kouki.

En fin, Kouki estudia para ser veterinario, suele preocuparse mucho de sus mascotas, a las cuales trata más como familia que como simples animales.

Desde que Akai, el gato, llegó a la casa, se vio sorprendido por lo rápido que supo adaptarse a las reglas de un gato doméstico, por lo general, adoptar un gato ya adulto conlleva problemas. Los gatos callejeros suelen seguir pensando que deben marcar territorio o intentan buscar alimentos en la basura. Akai es un gato que a los pocos días aprendió a usar su caja de arena, pedir salir a base de maullidos y, también maullando, suele pedir su comida. Sin mencionar lo bien que se lleva con Kou, el conejito, quien todavía es algo pequeñito, tanto en edad como en tamaño. No son rudos cuando juegan, por tanto, no suele haber peligro.

— Ya llegué. — La voz de Akashi se escucha desde la puerta de entrada.

— Bienvenido a casa, Sei. — Responde Furihata en la comodidad de la sala de estar mientras ve interactuar a Kou y Akai.

— ¿Otra vez están jugando? Esos dos siempre tienen energías. Nunca pensé que un gato y un roedor se llevarían tan bien.

Al escuchar la palabra "roedor", Furihata, Kou y Akai se le quedan viendo a Akashi, los dos últimos no se sabe por qué, quizás simplemente imitaron a su dueño o porque el pelirrojo había entrado en su rango de visión. Al contrario de los animales, Furihata se volteó a ver a Akashi por otra razón.

— Sei, los conejos no son roedores. — Aclara el castaño repentinamente.

— ¿No?

— No. — Recalca la negativa. — Los conejos son del orden los lagomorfos, poseyendo grandes diferencias marcadas con los roedores. — Akashi ha encendido el chip para hablar rápido de Furihata, por accidente. — Por ejemplo, los lagomorfos poseen una mayor cantidad de pelaje alrededor de su cuerpo, a diferencia de los ratones, cuyas orejas, manos y pies carecen más de pelo. — Explica mientras señala las patas y orejas de Kou para argumentar su explicación.

Y así continúa hablando por unos minutos sobre las diferencias entre Lagomorfos y Roedores, lo bueno es que habla rápido cuando se emociona, eso acorta mucho el tiempo de exposición de su cátedra; sin embargo, Akashi lo escucha con una sonrisa en los labios. Una de las tantas cosas que ama en la personalidad de Kouki, es lo explicativo que puede llegar a ser. Hablando con mucho detalle y en ocasiones, teniendo algo que dar como un ejemplo.

— ¡Esas son las diferencias más marcadas entre los roedores y los lagomorfos! ¡Por ello Kou-chan no es un roedor!

— Ha sido una plática muy interesante. Te agradezco el haberme enseñado algo nuevo, Kouki. — Dice y camina hacia el castaño. Le abraza de la cintura para susurrarle al oído. — ¿Qué tal si vamos a la cama a hablar sobre "hábitos de apareamiento"?

Furihata no tarda en salir de su modo explicativo a volver a ser ese chihuahua nervioso que tiembla y se avergüenza cada que el pelirrojo le dice cosas de esa índole. Se podría pensar erróneamente que seguiría en la cama siguiendo su cátedra, pero no, cuando se trata de cosas subidas de tono, es incapaz de procesarlas correctamente.

— ¡¡No delante de Kou-chan y Akai-chan!! — Ambas mascotas desde hace rato estaban en lo suyo de nuevo, más o menos a mita de la explicación volvieron a jugar.

— Si en algo se parece el conejo al ser humano, es que estamos en celo todo el año.

Akashi alza a Furihata y lo carga en sus brazos para llevarlo a la cama, afortunadamente, mañana ambos tienen libre, así que pueden coger como conejos esta noche y quedarse hasta tarde en cama.

Oigan, yo no supe lo de los conejos hasta hace poco xD Erudita no soy, fue una amiga que tiene de mascota un conejo quien me explicó uwu Luego yo investigué por mi cuenta uwu Y sí, sigo conservando el Headcannon de Kouki para veterinario >:v