[one side]

FOUR

     El padre de TaeHyung fue quien le ofreció a HoSeok que se quedara en la casa de ellos mientras se solucionaba todo, JiMin también le ofreció su casa pero al final los dos jóvenes amigos y el hombre mayor concluyeron que podrían quedarse esa noche a dormir en la sala del hogar de los Kim. Aunque estaban muy serios y con un nudo en la garganta, HoSeok y JiMin pudieron hacer eso de lado un momento para distraer al par de hermanos que no se atrevían a entrar a la casa, al menos así fue hasta que se pusieron a jugar con ellos.

Por supuesto las cosas estaban tensas, pero por un momento parecía que todos se unieron para aparentar que estaba todo bien, por los pequeños niños que dudaban aun así en relajarse, constantemente lanzaban miradas atentas alrededor, a veces se centraban en sus padres.

Con el pasar de las horas, la madre de TaeHyung se encerró en la cocina, bajo el pretexto de hacer la cena, dejó pasar el tiempo mientras cocinaba para todos. A los ojos de HoSeok, ella claramente estaba negando la situación, no creía en las especulaciones que habían hecho de momento, mientras JiMin, el padre de Tae y él habían intentado descubrir qué había pasado, ella se retiró repitiendo que todo era una broma del chico.

Lo veía en sus ojos, ni ella se lo creía, pero era la mejor manera que encontraba para afrontar la desaparición de su hijo.

Cuando los chicos accedieron a jugar con los videojuegos de los niños, ambos se fueron corriendo hacia su habitación en busca de sus tablets, el hombre adulto se recorrió en el sillón acercándose a los jóvenes —Estuve pensando —susurró—, y lo único que puedo creer con seguridad es que TaeHyung está atrapado en un tipo de dimensión, o en un mundo mágico.

—¿Mundo mágico? —diciéndolo así sonaba extraño, JiMin negó creyendo que era demasiado raro pero al ver a HoSeok, ambos sabían que las cosas en sí estaban demasiado raras.

HoSeok si dirigió a los dos —Yo creo que está atrapado, no sé donde pero... tenemos que hacer lo posible por sacarlo de ahí cuanto antes.

—Lo sabemos. —susurró JiMin, levantando su cabeza al ver a la mujer acercarse con un gran plato de comida. Ellos estaban en la mesa de la sala, y ella empezó a servirles, aunque intentaron levantarse y hacerlo por su cuenta, ella se negó firmemente. Al verla, notaron que había estado llorando hasta hacia poco.

Los niños llegaron con sus tablets, sin poder encenderlas pues se pusieron a cenar junto a los muchachos, su padre y madre, todos en silencio por toda la cena, la ausencia de TaeHyung siendo tan pesada que a penas y pudieron terminar lo que fue servido en sus platos.

Fue el padre de Taehyung, tras ver el cielo anocheciendo, quien pidió a HoSeok y JiMin que intentaran volver a tener contacto con el chico, ellos dos sí había logrado entablar una conversación con Tae, caso que no compartía el adulto. Lamentablemente no hubo suerte, ambos chicos sólo obtuvieron la respuesta de una contestadora.

Sin embargo no se detuvieron de intentar, inclusive el hombre mayor les dio su teléfono para que intentaran llamarle con éxito, y fue hasta que usaron ese celular que hubo una respuesta.

HoSeok se sobresaltó ante la agitada respiración y un grito desesperado —¡Papá! ¡Ya sáquenme de aquí! —el joven se sintió congelar al oír tal terror en su novio, temió que estuviera siendo herido, que su vida estuviera verdaderamente en peligro— Ayúdame... —le podía escuchar tan claro, lo contrario a su alrededor. Hasta que JiMin le sacudió, fue consciente de que le estaba hablando.

Apuntó al teléfono, avisando quién se encontraba en la línea —TaeHyung —ese nombre bastó para que JiMin se pegara a él intentando quitarle el celular, lo mismo hizo el adulto, pero HoSeok les ganó y puso altavoz para luego decirle —, respira y dime, ¿Estás bien?