Heaven Knows I'm Miserable Now (ZoSan)(CrocoSan)

I don't like my mind right now ...

A la mañana siguiente, Sanji decidió levantarse. Katakuri, sin embargo, seguía durmiendo así que no quiso sacarlo del sueño que tenía, después de todo, la noche anterior fue agotadora.

El rubio se arregló, bajó a la cocina a preparar el desayuno como si fuera otro día normal, los empleados de limpieza se habían marchado hace ya dos horas y Bege de seguro llegaría tarde como siempre.

***

Luego de una hora los pasos del pelirrojo distrajeron a Sanji, quien ya estaba por terminar de preparar el desayuno.

—Buenos días—Mencionó aun con esa expresión de haber logrado su cometido.

—Buenos días—Respondió el pelirrojo dando un bostezo —Yo debo marcharme a mi casa—Dijo un poco avergonzado por lo ocurrido anoche. Le seguía pareciendo una situación irreal ...e irónica.

—Quédate a desayunar—Propuso Sanji comenzando a servir la mesa—De ahí te puedes ir si quieres—

—No creo que sea oportuno perder más tiempo acá—

—Solo unos minutos, no dejare que te vayas con el estómago vacío—

—No lo creo...—

—Hice Donas, y están sabrosas—Informó el rubio.

Ese era una de las delicias favoritas del pelirrojo, así que aceptó sin discutir más.

—¿Café, té o agua caliente pura?—Preguntó.

—Quien diablos toma agua caliente pura—Se burló el grandulón.

—Yo, mi tío, mucha gente—

—Un café está bien—

Sanji le trajo un café a su acompañante de turno y misteriosamente el joven lucia encantado con la comida, como si hubiese sido el mejor día de su vida. Sanji se sentía realizado y veía al pelirrojo sabiendo que le quedaba poco para disfrutar de los buenos momentos, pronto podría vengarse de él.

***

El timbre sonó luego de unos cuantos minutos que estuvieron sentados. El pelirrojo no se alarmó del todo porque si era Bege solo podía tomarse como un desayuno entre dos compañeros de curso. El bravucón sabía exactamente que el rubio no había tenido las agallas de contar todo el acoso escolar a su tío.

El rubio fue a abrir la puerta creyendo que era el mafioso...pero no era él sino su profesor, era Crocodile.

A Sanji de inmediato le cambio el rostro cuando vio al mayor, después de la noche anterior seguía molesto por haber visto al mayor junto a su esposa.

—¿Qué quieres? —Preguntó dejando notar su evidente molestia.

El mayor frunció el ceño.

—No uses ese tono conmigo—respondió con tanta confianza como siempre—¿Tu tío llegó?—

—No—Contesto de la misma manera.

El mayor quedo sorprendido.

—Dijo que venía en camino—