Rompecabezas (1/2)

3 0 0
                                    

Uno de mis juegos favoritos de mesa son los rompecabezas. Se mezclan piezas, se pierden algunas.

Siempre harás el mismo que te sepas de memoria, o intentarás hacer el que te regalaron y nunca completaste. Quizá, te llevás una sorpresa, porque no te gusta, y volvés al mismo de siempre.

Capaz te das cuenta de que tu nuevo rompecabezas es mejor que el otro, y terminás dejando el anterior.

O te aburrís a medio hacerlo y lo volvés a guardar.

O capaz lo encontrás irresoluble, ya que son muchas piezas.

Rompecabezas hay de todos, hay que animarse a hacerlos.

La pregunta es: 

¿Puede una persona, o la vida misma, ser un rompecabezas?

¿Por qué no podemos ser la pieza que otro perdió y necesita para completarse a sí mismo?

Textos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora