Textos.

Preguntas

Pregúntame por qué escribo, por que no tengo una respuesta.

Pregúntame:

A quien le dirijo cada una de mis obras, y tendrás que escucharme un buen rato.

Por qué sigo viva, si estos son los textos de un suicida.

Cuantas ganas tengo de morir, cuantas veces lloré en mi cuarto, abrazada a la almohada, a las 2 de la mañana, hasta quedarme dormida.

Cuanta gente conozco que también se siente así. 

Cuanta gente me quiere de verdad, y los contaré con los dedos de la mano.

Cuantas veces se han reído de mí.

Que hice al respecto.

Cuanto la necesito.

Cuanto la amo.

El porqué de mis cortes.

Sobre mi familia, puede que te lleves una sorpresa.

Donde creo que está mi papá.

Pregúntame, y sabrás, solo un poco, más de mí.

Pregúntame cosas estúpidas, cosas que me hagan reír.

Sobre la escuela, sobre mis amigos, sobre los que se fueron, los que están y los que sienta que nunca se irán.

Sobre mi sonrisa y cuán bonita es.

Como me va en el amor, cuál es mi deporte favorito, la comida que más odio, y cosas así de triviales.

Pregúntame solo para pasar el rato, para socializar, para enlazar una amistad.

¡Sólo si quieres!

Pero si vas a preguntarme...

No me preguntes como me siento.

Como me siento al ver a los demás y ver que soy un desastre comparado a ellos.

Como me siento cuando la ropa no me queda.

Aunque si quieres preguntarme... me verás llorar.

Y odio que me vean llorar.